La campaña del albaricoque, que se ha iniciado con algunas variedades tempranas, se prevé a la baja en cuanto a la producción lo que incidirá en la pérdida de alrededor de 5.000 jornales. Según las informaciones facilitadas a La Tribuna de Albacete por agricultores y responsables de empresas y cooperativas, la cosecha de este año sólo rondará el 20% del total de la producción habitual y en estos primeros días de campaña, son muchas las incertidumbres, a causa de las heladas y el pedrisco de semanas atrás, a la espera de la decisión de las compañías aseguradoras y si los precios de mercado son mínimamente aceptables para que sea rentable realizar la recolección de los que quedan sin haber sido afectados en las parcelas. Pese a las incertidumbres, en algunas zonas que no se vieron afectadas por las inclemencias meteorológicas, si que ha comenzado la cosecha del búlida (un albaricoque que se destina prioritariamente a la industria), y otras de mesa, como Michel o Catarrocha. El albaricoque es fundamental para la economía local, ya que en una campaña buena  se pueden superar los 7.000 jornales, entre la recolección y el envasado de cajas, y este año no pasará de 2.000, «lo que da muestra de la importancia que tiene para un pueblo como Tobarra, ya que no sólo se perjudican los agricultores, sino que hay mucha gente involucrada: recolectores, envasadores, transportistas y otros que no van a poder ingresar dinero estos meses. De hecho, en la Cooperativa contratamos entre 20 y 25 personas el pasado año y en el actual, es probable que no necesitemos más de media docena».