Parece que la denominada desescalada comienza a ser una realidad en todos los ámbitos y la justicia no es una excepción, la prueba es que los jueces se incorporaron ayer al trabajo de forma presencial y que a partir de mañana se reanudan los plazos procesales paralizados por el estado de alarma. Una reanudación de la actividad que el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Vicente Rouco Rodríguez, cree que sería más segura si se realizara en la nueva Ciudad de la Justicia. En cualquier caso, la vuelta no será fácil, ya que se espera una avalancha de asuntos tras dos meses y medio de paralización.

Aunque parte de la justicia ha seguido funcionando durante el estado de alarma, otra parte importante se ha paralizado, ¿qué medidas se van a tomar para paliar la avalancha de casos que se avecinan?

Lo primero para mí es que empecemos, luego vendrán las distintas propuestas. Tenemos que demostrar que se puede hacer justicia en estas circunstancias, con estos protocolos y en las salas que tenemos. Al principio tendremos que ir con serenidad, cautelas, prudencia, porque es importante transmitir un mensaje de confianza. Por eso prefiero que al principio lo poco que se pueda hacer, se haga bien y a medida que vayamos ganando esa confianza, podamos implementar un mayor ritmo en el trabajo.

Entonces, por el momento no se prevén refuerzos, ni llamar a jueces sustitutos, como proponía alguna asociación, hasta ver cómo funciona la cosa.

Si no tenemos salas de vista, no podemos hacer juicios, lo importante no es que tengamos refuerzos, lo importante es que intentemos recuperar el ritmo y que lo que se haga, se lleve a cabo con regularidad y transmitiendo la sensación de que se puede hacer con medidas de seguridad que preserven el derecho a la salud de los que intervengan, luego, si contamos con los medios necesarios, vendrán otras medidas de refuerzo. No podemos poner más jueces si no hay salas donde celebrar juicios. En muchos órganos judiciales no se van a poder utilizar determinadas salas, por su reducido tamaño o porque las condiciones de ventilación o higienización no son las adecuadas. 

Habla de falta de salas para celebrar juicios en condiciones de seguridad, ¿han solicitado al Ministerio usar la Ciudad de la Justicia?

Sin lugar a dudas. La necesidad de sedes judiciales es patente. Aquí tenemos varias sedes diseminadas. Las salas de vista más grandes están en el TSJ, pero los demás edificios tienen salas de reducidas dimensiones y muchas veces con unas condiciones de climatización que dirá la Gerencia si son las adecuadas. Las salas de espera son reducidas, los accesos son más complicados. 

¿Pero el edificio está listo?

El nuevo edificio está prácticamente terminado, pendiente de unas obras  de terminación de la urbanización. Además de eso hay algunas cuestiones de cableado, de conexiones de tipo telemático, informáticas, que  no se han podido terminar por la situación del estado de alarma, que afectaba también a la operatividad de las empresas que tienen que hacer ese trabajo. Es un edificio magnífico, amplio. Cuenta con muchas salas de vista, todas en la parte baja, con unas salas de espera muy adecuadas y amplias, pasillos amplios. Si el sistema climatización funciona bien, es evidente que reúne todas las condiciones necesarias, para poder hacer una justicia en mayores condiciones de seguridad y con una mayor frecuencia de señalamientos.

¿El traslado es posible a corto plazo? 

Yo he trasladado mi interés al Ministerio de Justicia, al secretario general. He  hablado con la Gerencia y saben de nuestro deseo y están pendientes de que se terminen esas obras y de obtener la licencia de ocupación,  que se obtendrá cuando esté el proceso administrativo concluido. En Guadalajara todo está hecho, sería cuestión de trasladarnos, en Albacete es cuestión de que terminen esos trámites, que deberían acelerarse de la manera más rápida posible y ojalá estuviéramos allí a la vuelta del verano o incluso antes, aunque esto último no creo que sea posible. Tendremos que visitar el edificio, porque quieren verlo los demás sectores profesionales, quieren verlo los funcionarios, para ver si se puede usar en el ámbito profesional interno.  

¿Es probable que parte de las nuevas salas se utilicen para realizar juicios en la nueva normalidad?

No está definido como va a ser, yo lo que considero es que deben trasladarse allí no sólo para hacer juicios, sino para hacerlo todo. Cuando antes se haga el traslado y sea posible ocupar el nuevo edificio mejor. Incluso ya he dicho que el traslado se realice sin la Nueva Oficina Judicial, porque no podemos estar pendientes de un procedimiento administrativo que va a tardar, para poder hacer un traslado, que debe realizarse cuanto antes.

¿Su idea es que se instalen después de verano?

Espero que el traslado a la Ciudad de la Justicia pueda realizarse después de verano, en septiembre, no sé si podrá ser para esa fecha, pero es necesario que cuanto antes se pueda utilizar, porque podremos hacer una justicia mejor y en unas condiciones de salud y seguridad mejores y con una frecuencia de señalamientos mayor de la que tenemos o de la que vamos a poder ofrecer al principio.

¿Cree que antes de finales de año estarán allí con seguridad?

Si de mí dependiera el traslado a la Ciudad de la Justicia se realizaría ya, cuanto antes se haga mejor, si puede ser a la vuelta de verano mejor y si pudiera ser antes del verano con este parón que hemos tenido mejor, pero eso no va a ser posible, yo creía que sí, pero no va a poder ser, porque administrativamente no se puede entender como concluido el proceso de terminación del edificio y hay que hacerlo con arreglo a determinados trámites legales. Hay que obtener la licencia de ocupación, que tardará un tiempo.

Hasta que el traslado sea posible, ¿cómo van a hacer para celebrar los juicios en algunas salas cuyo tamaño hace imposible mantener las distancias de seguridad?

Imposible no es. Hay algunas salas en las que no se podrán celebrar el mismo tipo de juicios que antes se celebraban, por eso hemos establecido, en el ámbito de los protocolos de reanudación de la actividad judicial, unos grupos de trabajo, en cada uno de los partidos judiciales, en cada una de las sedes y se está analizando las salas donde será posible hacerlos, distribuyéndolas entre órganos judiciales. Por ejemplo aquí, para los juicios penales vamos a poner a disposición las salas más grandes, como la de la Audiencia Provincial de la Sección Civil o la del TSJ para que puedan celebrar allí juicios, ya que los juicios penales requieren de actividades más presenciales.

¿Y el resto de las salas?

En las demás salas se va a establecer una frecuencia de señalamientos, una reordenación de las agendas, para ver los juicios que se pueden celebrar y con que frecuencia, porque no podemos tener a la gente esperando. Las esperas se tienen que reducir en la medida de lo posible. Además tiene que haber un cierto espacio de tiempo entre la celebración de vista y vista para poder, en su caso, adoptar las medidas de limpieza. Se van a dar una serie de protocolos de utilización de protecciones de los micrófonos. En los edificios judiciales va a ser necesario el uso de la cita previa, la consulta telefónica o por correo electrónico, para evitar en la medida de lo posible la afluencia numerosa de público y profesionales, sólo cuando sea necesario la actividad presencial. Al mismo tiempo se han puesto ya carteles informativos para recordar el uso obligatorio de las mascarillas, la utilización de los dispensadores de gel hidroalcohólico en la entrada de los edificios, la advertencia a los ciudadanos de que deben acudir provistos de sus mascarillas y sus guantes. Además va a haber un especial seguimiento de las citaciones para evitar suspensiones.  

¿Cómo van a controlar los accesos?

Se va a facilitar a los miembros de seguridad las hojas de los señalamientos, para que sepan quien tiene que entrar y que informen donde tienen que ir, para que nadie tenga que estar circulando y preguntando en cada momento donde va. Es importante que se tenga prudencia y paciencia. Hay que pedir a los ciudadanos que acudan con confianza, cuando sean citados. Me consta que se ha hecho un trabajo de limpieza y desinfección de todas las instalaciones judiciales, desde hace ya mucho tiempo, limpiándose sobre limpio y las condiciones higiénicas son muy buenas.

En cualquier caso, su deseo es que el traslado al nuevo edificio sea lo antes posible.

Afortunadamente el edificio se ha terminado en tiempo, para poder utilizarlo en estos momentos críticos y lo que anhelamos es poder prestar nuestro servicio, porque el funcionamiento de la justicia es imprescindible para el funcionamiento de una sociedad democrática y para un estado de derecho. Hay que contribuir a la paz social, que es fundamental para el progreso, la seguridad jurídica y  para salir de este atolladero.

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