Compras que ayudan

A.G
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Medicus Mundi y la Asociación de Caridad San Vicente de Paúl recaudan fondos en las fechas navideñas con sus rastrillos solidarios

Escaparate del rastrillo de Medicus Mundi, en el que pueden adquirirse productos procedentes de varios países. - Foto: José Miguel Esparcia

Estamos en fechas de incitación al consumo. La campaña navideña es la temporada alta de numerosos comercios, que recibirán durante este mes a oleadas de clientes en busca de regalos, caprichos, elementos decorativos o los alimentos con que prepararán sus menús festivos. Entre ellos, en pleno centro de la ciudad, pueden encontrarse estos días los tradicionales rastrillos, gestionados por voluntarios y cuyos beneficios se destinan a proyectos de ayuda a las personas más vulnerables. 

Es el caso de las tiendas temporales de la Asociación de Caridad San Vicente de Paúl-Luisas de Marillac (en Marqués de Villores, 10) o Medicus Mundi (calle Mayor, 12), instaladas en locales cedidos que tendrán sus puertas abiertas hasta el próximo día 5 de enero, al igual que lo vienen haciendo cada Navidad desde hace ya décadas. 

En el primero de ellos, puede adquirirse una amplia gama de manualidades, elaboradas por las propias voluntarias, ornamentos propios de estas fechas o productos alimentarios donados por empresas. La recaudación de su venta se destinará a uno de sus proyectos de voluntariado diocesano, que concede becas a mujeres de Albacete en riesgo de exclusión social para que obtengan un certificado de profesionalidad y facilitar así su acceso al mercado laboral. 

Así lo detalla Ana Candel, una de las voluntarias que atiende el rastrillo, quien explicó que la asociación lleva a cabo otras iniciativas solidarias, como la atención en prisión de la Pastoral Penitenciaria, el acompañamiento de usuarios del asilo de San Antón o la atención personalizada a 38 familias del barrio de La Milagrosa.

El rastrillo de Medicus Mundi ofrece, por su parte, productos que vienen de más lejos, de todos aquellos países en que la ONG desarrolla sus proyectos de cooperación internacional. Figuras, máscaras o instrumentos musicales, entre otros, elaboradas en América, África oAsia.

Según explica Josefa Martínez, voluntaria de la entidad, todos ellos provienen de «empresas que adquieren los productos directamente de los artesanos de esos países, así los ayudamos a ellos a la vez que obtenemos fondos para colaboración». Los del rastrillo de Albacete se destinarán a un proyecto iniciado en 1993 para promover la salud ocular en Burkina Faso. Además, la entidad también trabaja ahora «para asegurar el derecho a la salud de las mujeres migrantes en Marruecos».