«Se empieza a reconocer que aquí se trabaja sobre el ciervo"

I.M
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Tomás Landete, catedrático de Producción Animal, investigador y miembro del Grupo de Biología de Cérvidos de la Universidad de Castilla-La Mancha

Tomás Landete, catedrático e investigador de la Universidad regional. - Foto: José Miguel Esparcia

El catedrático de Producción Animal  e investigador de la Universidad Regional , Tomás Landete, es, según la página web estadounidense Expertscape, el segundo experto mundial en cuernas de ciervo tras el doctor chino Chunyi Li. Landete, que da clases en la Escuela de Ingenieros Agrónomos, forma parte del Grupo de Biología de Cérvidos de la UCLM junto a Andrés García y Laureano Gallego; un grupo, que  lleva más de 20 años trabajando en resistencia mecánica, histología y deficiencias minerales de la cuerna y es que la cuerna de los cérvidos, como explica este investigador, es una estructura especialmente importante, no solo como trofeo, sino también para la biología y, más recientemente, para la medicina.

Hace unas semanas la Universidad de Castilla-La Mancha daba a conocer  que usted era, tras un doctor chino, el segundo experto mundial en cuernas de ciervo, pero ¿qué tienen de especial estas cuernas o, mejor dicho, por qué se investigan?

No es lo mismo estudiar la cuerna  de un ciervo que estudiar, por ejemplo, una pata  de un gallo o  un pico de  un pato.  La cuerna es una estructura muy especial porque es la única de un animal de sangre caliente que se regenera completamente. Como los ciclos biológicos están adaptados al año, la cuerna tiene que crecer en tres meses para ser usada en otoño que es cuando se aparean. Eso significa que una cuerna de 16 kilos y de 80 ó 90 centímetros de largo crece a velocidades de uno a cuatro centímetros  por día.  La cuerna crece por la punta y a una velocidad, sea  en longitud a nivel de nervios o de vasos sanguíneos o en superficie de piel, muy superior al cáncer. Esto es algo sorprendente que no tiene comparación con ninguna estructura del reino animal,  por eso es tan importante estudiarlas.

Esto hace especial su estudio, pero es que igualmente las cuernas son los huesos más resistentes que existen, siendo su resistencia de impacto siete  veces superior a cualquier hueso. Las cuernas no sólo son los auténticos huesos de Superman sino que, además, sí tuviéramos cuernas en lugar de huesos, no habría ningún paciente en el servicio de traumatología hospitalaria. 

¿Y también está, por otro lado, la parte económica?

El  ciervo es la especie de caza más importante qué hay en Europa y los mejores ciervos se miden precisamente por el tamaño de la cuerna. Reyes, emperadores y nobles a lo largo de la historia han luchado por tener las mejores cuernas, como hoy lo hacen los más ricos. Por ejemplo, sabemos que ya en 1712, el zar ruso  Pedro, el grande, dio seis ciervos comunes blancos  al emperador del Sacro Imperio Romano Germano y rey de Bohemia y Hungría, Carlos VI, con motivo de su coronación. Otra persona podría haber pensado que sería mejor regalo oro o diamantes, pero eso le sobraba a ambos reyes,  lo que no tenían, por contra, eran ciervos blancos. Hoy en día los criadores de distintas partes de Europa pugnan por tener los mejores ciervos. Criar cuernas grandes es importante y precisamente la cría en granja es la que te va a permitir seleccionar los animales con buena genética, lo cual, no deja de ser, una nueva forma de producción animal. Por esa razón empezó el grupo en el que estoy, el de Biología de Cérvidos junto a  Andrés García y Laureano Gallego que fue quien lo formó en 1994 y  creó, en esta zona  de caza, la granja experimental de la UCLM, y así poder estudiarlos y llegar a tener este puesto en el ranking mundial en el estudio de las cuernas. Yo en segunda posición,  Andrés en quinta y Laureano en undécima.

Ahora bien, la parte económica solamente es una parte de la historia. Lo que es realmente increíble de la cuerna son sus características biológicas, pudiendo llegar incluso a tener implicaciones en Medicina.

¿Qué va a suponer este reconocimiento para la UCLM y para el grupo al que pertenece?

Este reconocimiento es un orgullo porque debajo de mi  nombre va el de la Universidad de Castilla-La Mancha y el de Albacete.  A  nivel mundial se empieza a reconocer que Albacete es el sitio en donde se trabaja sobre el ciervo y hay buenos expertos. Personalmente es una satisfacción pero también me sorprende porque no  tenemos mucho dinero en investigación y  hay gente que va a perder su trabajo.

Ha mencionado 1994  y a Laureano Gallego, ¿fue entonces cuando empezaron a investigar? ¿Qué queda por hacer?

En este mundo lo que queda por delante es muchísimo más y más impactante que lo que hemos descubierto. Las cuernas de ciervo son excelentes. Volviendo atrás, no obstante, diré que cómo el periodo de mayor crecimiento en un mamífero es la lactación, empezamos estudiando la adaptación en ciervos y durante muchos años hemos sido el mejor grupo internacional en este aspecto, el que más estudios ha hecho. El grupo de Laureano Gallego veía las cosas desde un punto de vista claramente de producción animal, pero yo que soy zoólogo y sabía que las madres a veces invierten más en un sexo que en el otro, pensé en aplicarlo a la lactación para ver si las madres daban más leche o con una composición diferente a los hijos que a las hijas. Un hijo puede llegar a ser el dueño de un harén, aparearse con 20 hembras cada año, y así su madre tendrá 20 o 40 nietos, mientras que si tiene una hija excepcional, tendrá un solo hijo por año que sobrevivirá mejor que los de otras hembras, pero será un nieto por año al fin y al cabo. 

El caso es que esto nos permitió descubrir que por primera vez en un mamífero, las madres ciervas producen más leche y con una composición distinta para sus hijos que para sus hijas, con más proteínas .

La nutrición fue el inicio, ¿qué vino después?

Una vez que habíamos realizado muchos estudios en leche de este tipo y de otros, y siendo la leche  un sistema complejo en composición, pensamos que posiblemente la composición de la cuerna también sería variable y dependería de factores como la nutrición, la calidad del macho o el estado de su salud, entre  otros. Y descubrimos tanto que esto era así no sólo para los minerales sino también para las propiedades mecánicas y la histología, como que se podían utilizar esas variaciones para diagnosticar deficiencias minerales que al corregirlas mejorarían el tamaño de la cuerna y su resistencia mecánica. Siempre hemos hecho un poco de todo menos reproducción.

 

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