La selección española U19 femenina se encuentra desde el pasado día 16 en Albacete preparando su participación en el Mundial de la categoría que se disputará en Hungría del 7 al 15 de agosto. El combinado nacional entrena en el Pabellón del Parque y permanecerá en la ciudad hasta el día 28, para participar después en un torneo de preparación en Guadalajara y poner rumbo al país magiar.
El estricto protocolo que impone la FIBA hace que las jugadoras solo puedan ir del Hotel Los Llanos de la capital al Pabellón del Parque, después de que el año pasado se quedara en blanco a nivel de selecciones al suspenderse todas las competiciones debido a la pandemia.
Al frente de la U19F está Mario López, uno de los técnicos nacionales más experimentados en el baloncesto femenino, como lo demuestra su trayectoria, con cinco oros en los Europeos U16 y U18, tres platas, dos en campeonatos del mundo, y un bronce en otro Europeo. Todo ello viene avalado por su espectacular trayectoria con el Lointek Gernika Bizkaia, al que comenzó a entrenar en 2009 en Primera Nacional y en cuyo banquillo continúa, las últimas ocho temporadas en la máxima categoría, la Liga Femenina Endesa. Un profeta en su tierra que ha vivido de primera mano la evolución del baloncesto femenino en nuestro país a través de su propio club y con su trabajo en las selecciones nacionales.
Este diario pudo mantener un encuentro con Mario López, respetando el protocolo FIBA, el que se habló del trabajo de la U19F en Albacete, las expectativas de cara el Mundial y esa evolución del baloncesto femenino que desde la capital manchega se ha visto de lejos, a pesar del buen trabajo que a lo largo de los años han realizado diferentes clubes, sin lograr nunca dar ese salto de calidad necesario.
En Albacete, «las condiciones no pueden ser mejores», pero el equipo se ha encontrado «una ola de calor importante y al no haber aire acondicionado en el Pabellón hemos tenido que retrasar los horarios de la tarde porque había jugadoras con mareos. El otro día estábamos a 42 grados, hay que parar más de lo habitual para hidratarse y tener cuidado con la duración de los ejercicios. De todas formas, las condiciones tanto del hotel como del campo, que tenemos al lado, están bien».
Tras centrar los primeros días en el tema físico, ahora lo más importante es lo táctico. Las jugadoras vienen de no competir a nivel de selecciones el año pasado y nunca han estado juntas. «Estuvieron como U16 y desde entonces no han competido todas juntas. Veremos como se comportan ahora, porque tras el parón del año pasado todo es una incógnita, tanto el nivel que podemos ofrecer como el nivel de los demás».
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