El BSRAmiab Albacete escribió el pasado domingo un capítulo más en su brillante historia en el baloncesto en silla de ruedas, tras lograr clasificarse contra todo pronóstico para la final a cuatro de la Liga de Campeones y convertirse en uno de los cuatro mejores equipos de Europa. Uno de los responsables de este éxito es José Carlos Jurado, que lleva en el club desde su fundación hace 32 años y que ha sido jugador, entrenador y ahora director deportivo. Sin suda, Jurado se ha llevado una las alegrías más grandes de su vida deportiva.  

El BSR Amiab jugará la final a cuatro de la Liga de Campeones... palabras mayores.

La verdad es que estamos haciendo historia, cada año escribimos una página diferente, sobre todo en competiciones europeas, donde todos los años avanzamos en el ránking y vamos consiguiendo objetivos cada vez más importantes. Para nosotros es toda una satisfacción el haber conseguido este hito no solamente para el deporte albacetense, sino también para el de Castilla-La Mancha.

Tras la segunda jornada y con dos derrotas parecía imposible que lograran la clasificación, ¿qué pasó para que al final jueguen la final a cuatro en mayo?

Es lo bueno que tiene el deporte, que nada es imposible y que mientras haya una opción hay que aferrarse a ella. El sábado después de perder ante el Turingia parecía imposible, pero en deporte mientras hay vida hay esperanza.

¿La ausencia de presión en el tercer partido pudo ser clave para ganar al Cantú de 23 puntos?

Puede ser que los jugadores, una vez que lo vieran todo perdido, estuvieran más relajados o que decidieran apelar a la heroica e intentar demostrar que el equipo tiene categoría para conseguir la clasificación. Cuando depende de que le pelota entre en el aro, la suerte es importante. Es maravilloso ver jugadores que en el primer partido contra los turcos tuvieron un 10% de acierto en el tiro y en el último partido consigan más del 70%, todo es posible en el deporte.

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