La ciudad de Albacete cerró un mes de enero muy completo en lo que a términos meteorológicos se refiere, como consecuencia de las cinco borrascas de alto impacto que trajeron a la ciudad nieve, lluvia, temperaturas de récord y fuertes rachas de viento.

El primer mes del año comenzó con la borrasca Filomena que se caracterizó, principalmente, por la nieve. Durante cuatro días seguidos nevó en la ciudad y, en algunos puntos, el espesor llegó a los 20 centímetros. Después de la nieve, los termómetros se congelaron y una ola de frío asoló a todo el país. La temperatura más baja en la semana del 11 al 17 de enero en la capital albacetense, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), fue la recogida por la estación de la Base Aérea de Los Llanos, de 14,1 grados bajo cero, el martes día 12.

Con la borrasca Filomena, los servicios de Seguridad del Ayuntamiento de Albacete atendieron más de un millar de incidencias. En concreto, la Policía Local intervino en 780 incidencias por el temporal, al principio, avisos por problemas de acumulación de nieve en las calles (221 incidencias) y, después, caídas de hielo y carámbanos en cornisas, tejados y fachadas (casi 250 de este tipo). Asimismo, los Bomberos llevaron a cabo 295 actuaciones desde el día 7 y hasta el 21 de enero, el grueso (238) tuvo que ver con la retirada de nieve en cornisas o tejados o con el saneamiento de fachadas que sufrían desperfectos a medida que el agua se congelaba en las grietas y ocasionaba roturas. 

Tras la primera borrasca del año, llegaron Gaetan, Hortense, Ignacio y Justine, todas ellas caracterizadas principalmente por las rachas de viento. La alerta amarilla e, incluso, naranja fue la tónica habitual durante varios días de enero.

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