Los locales cerrados son todavía mayoritarios en la estación Vialia-Los Llanos de Albacete, pese a los 10 años que va a cumplir en diciembre la llegada de la Alta Velocidad a la ciudad. Esa explotación comercial fallida para la estación albacetense es un hecho que en una entrevista en el diario elEconomista.es reconocía a actual presidenta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Isabel Pardo. En dicha entrevista, Pardo decía que aunque el modelo de explotación había sido un éxito en estaciones de AVE como la de Málaga, no había funcionado igual en otros lugares, y mencionaba Albacete como ejemplo de esos lugares donde el modelo comercial ha sido «un fracaso».
La presidenta de ADIF mencionaba en la entrevista esta disparidad de resultados como argumento para defender la revisión del modelo que está en marcha, y que quiere revertir ese fracaso parcial. ADIF contrató con la firma A.T Kearney el diseño de un plan para revisar, modernizar e impulsar la explotación comercial de sus estaciones de tren. La firma de consultoría tiene medio año para presentar este plan, que cuesta a ADIF 775.000 euros. La compañía quiere tener un estudio para diseñar ese nuevo modelo de explotación comercial de sus estaciones que, según datos de la compañía, suman 154.000 metros cuadrados de superficie y registran el tránsito de un total de 200 millones de viajeros. Con el nuevo plan de estaciones, según explicó ADIF en un comunicado, se busca aumentar y adecuar los espacios disponibles en las estaciones para la actividad comercial y lanzar medidas para atraer a «marcas y operadores de prestigio y con capacidad de generación de un nivel de elevadas ventas» y, por tanto, de pagar «mayores rentas» a la compañía pública por el alquiler de los locales. 

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