Los animales abandonados tienen donde estar en Villarrobledo y de ello se encarga, desde hace más de una década, un grupo de mujeres que en su día decidió promover la recogida de los animales  que se encontraban en la calle o el campo abandonados y resguardarlos de la intemperie y los malos tratos en la calle.

Después, con el paso de los años, surgió otra organización con un joven colectivo también representado con chicas de la localidad que decidieron crear una Asociación con el nombre Huellas de Vida.

Eran voluntarias que desde niñas habían aprendido en el Albergue de La Esperanza a cuidar y a tratar a diario a los perros abandonados.

Villarrobledo tiene voluntarios de raza en las perreras

El colectivo de Huellas de Vida prosperó en la idea de gestionar la perrera municipal abandonada en el tiempo.

Con esfuerzo y mucho sacrificio han logrado que como en el albergue La Esperanza los perros abandonados tengan un lugar donde vivir, estar alimentados y ser atendidos a diario, además de compartir con otros animales un espacio para una vida estable.

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