El suicidio es un fenómeno complejo en el que están implicados mucho factores, y si bien constituye un importante problema de salud pública porque es una «realidad todavía invisible», su abordaje no debe circunscribirse sólo al ámbito de la salud mental, sino que la intervención debe venir acompañada de otras actividades preventivas desde Educación, Trabajo, Justicia, Bienestar Social, fundaciones tutelares y asociaciones de pacientes. Bajo este prisma la jefa de Salud Mental del Área de Salud de Albacete, la doctora María Jesús Montes, aludía a la dimensión de esta problemática, teniendo en cuenta que el suicidio sigue siendo la principal causa de muerte no natural en España, produce el doble de muertes que los accidentes de tráfico y 80 veces más fallecimientos que la violencia de género. Es también la primera causa de muerte en jóvenes de entre 20 y 24 años y la segunda, después de los tumores, de 15 a 30 años.
En el Servicio de Urgencias Psiquiátricas del Hospital Perpetuo Socorro, que funciona 24 horas al día y abarca toda el Área de Salud de Albacete (una población de 400.000 habitantes), en el último año (desde el 31 de agosto de 2018 al 31 de agosto de 2019) las urgencias psiquiátricas atendidas por una ideación o gesto autolítico representan el 9,2%, al margen de los suicidios consumados, que con datos del INEde 2017 (los últimos publicados) eran 26 en la provincia (21 en 2016). De ellos, el 61,8% de los pacientes atendidos por esta causa eran mujeres y un 38,3% varones; siendo el grupo mayor de afectados, el 45%, de edades comprendidas entre los 40 y los 60 años, sin embargo, un 11% de estas urgencias lo fue en población de 10 a 19 años. Además, la causa asociada de enfermedad mental con mayor prevalencia es la depresión, seguido del trastorno bipolar, el consumo de sustancias, el trastorno de personalidad, e incluso, los trastornos de adaptación (del ámbito social y laboral).
Pese a estas cifras que resultan escalofriantes la doctora Montes advirtió que son nulas las campañas para visibilizar esta realidad y normalizar ante la sociedad lo que con acierto se denomina fallecimientos voluntarios.
factores de riesgo. Precisamente con el fin de abordar esta cuestión y teniendo en cuenta que tener problemas de salud mental es el factor de riesgo más influyente tanto en el suicidio consumado como en el intento, ya que se asocia a más del 90% de los suicidios consumados y con la mayoría de los intentos suicidas, la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos Mentales de Albacete (Afaeps) conmemora hoy con un acto en la Fábrica de Harinas el Día Mundial de la Salud Mental que se celebra el día 10, y lo hace bajo el lema Conect@ con la vida.
El abordaje desde el punto de vista sanitario del suicidio debe realizarse, a juicio de la responsable de Salud Mental, desde Pediatría (Salud Infanto-Juvenil), Atención Primaria y Atención Especializada, «porque los mejores resultados que se han conseguido en la prevención del suicidio vienen de la formación de los profesionales de Atención Primaria y en la reducción de la puerta de acceso a métodos letales». Yeso es así, porque la especialista en Psiquiatría del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete aseguró que no existe ningún método de cribado o screening que permita detectar el riesgo suicida. «El diagnóstico clínico es lo más importante, pero no tenemos la posibilidad de prevenir al cien por cien el gesto suicida».
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