«Ab Fashion necesita crecer, pero solas no podemos»

ANA MARTÍNEZ
-

Lola Muñoz fue una de las primeras influencer de moda cuando ni siquiera el término estaba inventado

«Ab Fashion necesita crecer, pero solas no podemos» - Foto: VÁ­ctor Fernández Molina

Fue una de las primeras influencer de moda cuando ni siquiera el término estaba inventado. La alta costura española ha sido y sigue siendo su pasión, el motivo por el que cada mañana elige una prenda de un diseñador autóctono para hacer su pasarela particular en la vía pública, aún sin pretenderlo. Creer en sí misma y en las posibilidades de su tierra natal, Albacete, la empuja cada día a seguir organizando y coordinando, junto a la agencia de publicidad y márketing Cutter, el más importante salón de moda española dedicado a la alta costura que se celebra anualmente en Castilla-La Mancha: Ab Fashion.

¿Atrapó la moda a Lola Muñoz o fue al revés?

La moda atrapa a Lola Muñoz desde que nació, fue un flechazo. La moda ha ido innata en mí y se ha ido potenciando conforme ha pasado el tiempo. Cuando era joven leía todas las revistas, veía todo lo que salía en televisión, estudiaba a los diseñadores y me daba cuenta de que era lo que yo quería ser. Pasé de licenciarme en Derecho y trabajar en una empresa privada a cumplir uno de mis sueños: montar un atelier.

¿Qué le proporciona la moda?

La moda ayuda a la mujer a sacar su fuerza interior. Influye en la actitud de la persona. Desde la adolescencia siempre me ha motivado ir bien vestida, sentirme bien conmigo misma, no me visto para los demás, sino para mí, según mi criterio. A día de hoy sigo igual, no he cambiado nada. Sigo trabajando para que cualquier persona que quiera pueda lucir prendas distintas, con diseño… La originalidad tiene que estar en la calle, no solo en la pasarela. Desde que monté mi proyecto, mi idea es trabajar para que la moda que se ve en televisión vaya a la calle, a eventos, a celebraciones…, eso es muy importante.

¿La moda se ciñe a ese ámbito elitista que presentan las grandes pasarelas internacionales?

La moda es una actitud y ya es hora de romper con el mito de que es elitista, porque está intentando adaptarse al bolsillo de todas las personas. Hoy en día se puede encontrar moda y diseño a precios asequibles. 

¿No será en la alta costura?

Hay que diferenciar lo que es producción de moda, el llamado prêt-à-porter, de lo que es la alta costura. Son cosas diferentes que se ofrecen de forma distinta y a precios distintos. La moda en producción abarata costes y adapta sus precios a casi cualquier bolsillo. El mejor ejemplo son las franquicias que comercializan prendas para el día a día, pero también con diseño. En este sistema, una misma prenda se puede confeccionar en 27.000 ocasiones, pero si se trabaja a medida, que es lo que yo defiendo, hablamos de una moda diferente. La alta costura ofrece un solo diseño, único y exclusivo, para una persona concreta, que se adapta a su cuerpo y sus medidas. Un vestido a medida requiere estudiar a la clienta, conocer sus gustos, realizar varias pruebas y camuflar aquello que quiere. Todo esto se hacen en los atelieres, donde se trabaja minuciosamente para que la clienta quede lo más satisfecha posible.

Más información en edición impresa