En el juicio que se sigue, con jurado popular, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, un médico forense que se entrevistó con el acusado, en marzo de 2018, ha indicado que no se le aportó informe médico previo y que, de la actitud del acusado, "nada me hace pensar que anteriormente, en alguna de sus conductas, fuese anormal a la hora de responder ante la justicia".
Además, sobre el consumo de sustancias, ha considerado que presentaba "consumo en forma de abuso" pero "no dependencia" y que sea diferencia entre "abuso y dependencia" está en la "repercusión" que pudieran tener sus hechos.
Ha considerado que el acusado "no presentaba aspectos relativos a un trastorno de la memoria, ni ningún hallazgo que hiciera pensar que tuvo una manifestación psicopatológica aguda".
Otra perito que ha declarado en la sesión ha indicado que, en un análisis de orina al acusado, en marzo de 2018 -la muerte de Jairo tuvo lugar en septiembre de 2017- no había rastro del consumo de droga, solamente dio positivo a tranquilizantes.