La 'guerra' de las Montero

Agencias
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La 'guerra' de las Montero - Foto: Zipi

Ya lo vaticinaba el líder de Podemos, Pablo Iglesias, antes de formarse el Gobierno: "No va a ser  fácil". Y no lo está siendo porque hay asuntos de gran calado en los que socialistas y morados chocan. Como la reforma del Código Penal. Ayer, las Montero, la portavoz -María Jesús- y la ministra de Igualdad -Irene- colisionaron. Y es que la andaluza quiere que se haga poco a poco, todo en su conjunto, incluyendo los delitos de sedición y los sexuales, mientras la madrileña quiere un cambio inmediato en la regulación de los segundos.  

Así, la progresista insistió, tras la reunión del Consejo de Ministros, en abordar una reforma del Código Penal "de amplio espectro" que abarque desde los delitos sexuales a la sedición, frente a los deseos de la Cartera de Igualdad de no esperar para revisar la tipificación de los abusos y agresiones sexuales.

Al ser interpelada sobre la posibilidad de abordar esa reforma en distintas fases, después de que Irene Montero, considerara que la revisión de los delitos sexuales para establecer que "solo sí es sí" no debería esperar, la sevillana fue muy clara: "No hay novedad respecto a lo comentado". 

De este modo respondía a las presiones moradas y recordaba que el objetivo es abordar una reforma amplia que permita homologar la normativa española a la de otros países del entorno. En ese contexto, habrá trabajos "técnicos "y "políticos" que pilotará el Ministerio de Justicia en los que se hablará de la reforma de los delitos sexuales y también de la sedición, ya que durante el procés, dijo la portavoz, se ha puesto de manifiesto que hay que "acompasar" el ordenamiento español al europeo para que no haya "ningún tipo de alteración" o de "interpretación". 

En defensa de su compañera de partido, el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, echó más sal a la herida al asegurar que el endurecimiento de las penas por delitos sexuales se abordará de forma específica y distinta a la reforma del delito de sedición porque la violencia machista «va más allá de lo penal». En resumen, primera crisis a la vista.