Repsol ha anunciado esta mañana, durante reunión en la comisión de seguimiento del Expediente de Regulación de Empleo Temporal, que retirará el ERTE a partir del 21 de junio debido a los aumentos en los consumos de combustibles de automoción y la mejora de los márgenes en el mercado nacional. 

Esta decisión también ha sido trasladada al Ministerio de Trabajo, a los trabajadores del Complejo Industrial de Puertollano y a las autoridades locales y autonómicas.

Desde que se planteó el ERTE, Repsol dejó claro su compromiso de revertir esta medida laboral en el momento en que las previsiones del mercado mejorasen. Esta firme intención estuvo siempre presente durante la negociación mantenida con los agentes sociales y se reflejó en el acuerdo alcanzado con los representantes de los trabajadores.

Durante este tiempo, el número de personas sujetas a esta medida, de manera discontinua y con distinto grado de aplicación, se cifra en 407. La Comisión de Seguimiento del ERTE, formada por Repsol y la representación sindical, ha analizado a lo largo de estas semanas el desarrollo del expediente en un clima de transparencia y diálogo permanente con el objetivo de trabajar de manera conjunta para la reversión del mismo.

El repunte de la demanda de combustibles por el incremento de la movilidad y la previsible recuperación parcial del mercado, asociados al avance en el ritmo de vacunación y al descenso de la incidencia de la pandemia en España, han permitido tomar esta decisión y dar por finalizado el ERTE en Puertollano con antelación, a pesar de no haberse producido todavía una plena recuperación de la demanda.

En los últimos días, las ventas de carburantes de automoción se han recuperado parcialmente, pero siguen entre un 10 y un 15% por debajo de los niveles de 2019. En otros combustibles, como el queroseno para aviación, la demanda sigue siendo un 70% inferior al período enero-mayo de 2019.

La evolución de varios factores, como el ritmo de vacunación, la recuperación del turismo, los índices de movilidad, la recepción y gestión de los Fondos Europeos y la situación económica en general, mantiene un cierto nivel de incertidumbre y marcará la recuperación en España, prevista para 2022 o 2023.

En este escenario, el Complejo Industrial de Puertollano iniciará la puesta en marcha de las unidades de Destilación y las plantas asociadas de manera escalonada, con el fin de alcanzar un nivel de producción acorde a la demanda. Esta reanudación de la actividad en el área de Refino coincide con la finalización de la parada programada del área Química, en la que Repsol ha invertido 107 millones de euros en mantenimiento y nuevos proyectos. Durante estos meses, la parada ha concentrado un importante número de trabajos, la mayoría realizados por empresas auxiliares del entorno de Puertollano.

Repsol sigue avanzando en sus planes de transformación industrial en Puertollano, con proyectos innovadores que supondrán una inversión, para los próximos años, de 700 millones de euros, incluidos en el Plan Estratégico de la compañía y con una clara apuesta por la viabilidad de este centro industrial, en un contexto retador, marcado por la transición energética y la descarbonización.