Los barrios de Hospital, Medicina, Universidad y Hermanos Falcó de la capital albacetense serán los primeros que contarán con el contenedor marrón para la recogida de materia orgánica, unos contenedores que después irán llegando al resto de la ciudad de forma progresiva. Con el objetivo de aprovechar los biorresiduos, antes de enero de 2024 será obligatorio este contenedor, tal y como exige la Unión Europea, y el Ayuntamiento de Albacete se ha puesto manos a la obra para que la ciudad cumpla en este sentido.

El concejal de Sostenibilidad y Cambio Climático, Julián Ramón, y el jefe de servicio de Medio Ambiente en el Ayuntamiento capitalino, Juan Carlos Sánchez, explicaron que, por el momento, se instalarán 80 contenedores en estos barrios y los usuarios contarán con una tarjeta inteligente para poder abrirlos y despositar sus residuos orgánicos. 

El Consistorio realizará reuniones en los centros socioculturales de los barrios afectados y llevará a cabo una campaña informativa para explicar a los ciudadanos cómo deben actuar. El concejal indicó que los datos que extraigan de esta experiencia piloto les permitirán conocer la cantidad de residuos, la frecuencia de depósito, etc.