El CP Villarrobledo también tuvo un convulso inicio en su banquillo. Antonio Sánchez de la Calle ocupaba el puesto de entrenador, pero una discusión con el presidente Duro acabó con su destitución y el fichaje de Jesús Castellanos a finales del mes de agosto.

Castellanos vivió después los complicados momentos  del mes de diciembre, pero fue de los que decidieron seguir adelante a pesar de los problemas, confiando en una plantilla que tuvo fe en el ascenso. «El punto de inflexión fue lo que pasó en diciembre. El club era un solar en todos los sentidos. Berni dio un paso importante, se echó para delante y algunos decidimos quedarnos. Hubo una mítica reunión, cerramos la puerta y dijimos que esto lo sacábamos adelante. También hay que decir que esta plantilla tiene talento, además de formar un grupo de amigos y estar todos muy comprometidos.  Ha sido un año convulso, no ha sido nada fácil, pero todo lo que ha pasado nos ha ido reforzando y al final hemos logrado el ascenso», dijo Jesús Castellanos.

El técnico albacetense valoró el compromiso y talento de su plantilla, asegurando que «la hemos liado».

«Planteamos todos los partidos con la intención de ganar. En ningún momento hemos ido a especular, independientemente del resultado, y nos ha ido bien. Creíamos en lo que estábamos trabajando, porque veíamos que lo que hacíamos daba resultado. Hemos sido fieles al guión, a nuestro modelo de juego, y luego está la fe, creer que estábamos preparados para saltar de categoría. Todo el vestuario tiene mucho mérito», añadió.

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