Los agricultores de Albacete llevaban más de un año con ganas de ‘tractorada’ y ayer se desquitaron con creces, pues formaron una larga cadena de 350 tractores más un número indeterminado de vehículos que, al mediodía, empezaba en la Avenida de la Estación y llegaba hasta las puertas de la Subdelegación del Gobierno.

Los tractores empezaron a congregarse en la Avenida de la Estación, donde se encuentra la sede de Asaja, a partir de las 10 de la mañana. Les recibieron el secretario regional de la organización, José María Fresneda; el presidente provincial, Jorge Navarro, y su vicepresidente, Juan Miguel Cebrían.

«Lo que queremos transmitir con esta movilización es muy simple», decía Navarro, «que si los del campo no podemos hacer nuestro trabajo, los de la ciudad no comen, y el problema es que nos lo están poniendo cada vez más difícil para poder hacer nuestra labor, tenemos demasiados frentes abiertos».

El presidente de Asaja-Albacete recordó a los medios la ‘tormenta perfecta’ que vive el sector agrario  entre precios a la baja, costes al alza, importaciones descontroladas, recortes en las ayudas de la PAC, endurecimiento de las normativas ambientales, trabas en el acceso al agua, escasez de mano de obra y falta de relevo generacional.

Poco tiempo después, partió la cabecera de la manifestación, mientras aún había tractores que entraban a la ciudad. Con una estricta puntualidad, la caravana pasó por el Paseo de la Libertad y el Altozano para llegar a la Calle Ancha, donde pararon ante la delegación de Agicultura para entregar una tabla de reivindicaciones.

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