Un aparatoso incendio, que no provocó daños personales, calcinaba ayer un autobús en pleno casco urbano de la capital, provocando la lógica alarma entre los vecinos y viandantes debido a la espectacularidad de la densa columna de humo, que pudo observarse en buena parte de la ciudad.

Poco después de las 12 del mediodía y por causas que por el momento se desconocen, el vehículo procedente de Cuenca comenzaba a de repente a arder cuando se encontraba situado junto al semáforo de la calle Puerta  de Chinchilla, justo en la confluencia con Alcalde Conangla.

La rápida intervención del conductor que, nada más percatarse de lo que estaba sucediendo, instó a los viajeros -integrantes de un equipo junior de baloncesto de la próxima localidad de  Quintanar del Rey- a evacuar de forma urgente el autobús, fue determinante para que todo quedase en un susto.

Una dotación del parque de bomberos, integrada por nueve efectivos y cuatro vehículos, se desplazó de inmediato al lugar de los hechos hacia las 12,30 horas y tuvo que emplearse a fondo para sofocar las llamas, que dejaron el autobús totalmente calcinado, quedando el incendio extinguido prácticamente  en poco más de 30 minutos.

La explosión de los cristales y del motor, así como el humo generado por la combustión de los neumáticos, la tapicería y los plásticos del vehículo fue seguida con alarma desde las calles adyacentes por numerosos ciudadanos, que, móvil en mano, no cesaban de tomar fotografías del suceso. Hasta el lugar del siniestro también se desplazaron varios agentes de la Policía Local de Albacete, que realizaron un cordón de seguridad en torno a la zona del siniestro, efectivos de la Comisaría de la Policía Nacional de la capital y personal médico y una ambulancia del Sescam, aunque afortunadamente no hubo que lamentar heridos por las llamas o personas afectadas por el humo.