El actual mercado de trabajo del colectivo de extranjeros en la provincia albacetense presenta «indicadores positivos» y una buena evolución en los últimos años, paralela al desarrollo del mercado laboral para los españoles, aunque con algunas diferencias. Es lo que muestra un informe elaborado por el Servicio Público de Empleo Estatal dedicado al trabajo que hacen los inmigrantes en Albacete, a la afiliación y a la contratación, así como al tipo de trabajo que hacen. El informe con esas perspectivas optimistas se hizo con arreglo a los datos de 2018, cuando casi el siete por ciento del paro de la provincia era de extranjeros y también casi el siete por ciento de la afiliación a la Seguridad Social era de extranjeros. Según esos datos, la población inmigrante en la provincia presentaba un porcentaje similar, el 6,11%.
El informe dedicado sólo a la provincia hace constar que esos indicadores positivos del colectivo de trabajadores extranjeros están en «el aumento de la población, el incremento de la afiliación, la contratación, y el descenso de parados». Y es que en 2018 Albacete ganó un 3,46% de población extranjeras, lo que no impidió que de manera general se pierdan habitantes; en cuanto a las cotizaciones, crecieron casi un 11%. La contratación a trabajadores extranjeros aumentó casi un 17%, y el desempleo se redujo cerca de un 10%.
DIFERENCIAS. El documento muestra que en todo caos esta recuperación ha llegado al colectivo de extranjeros más tarde respecto al colectivo de nacionales. Así, la afiliación a la Seguridad Social de extranjeros en la provincia estuvo cayendo año a año hasta el año 2014, cuando en el caso de los trabajadores españoles esa caída se frenó ya en el año 2012.

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