El preacuerdo para un Gobierno de coalición firmado ayer entre el líder del PSOE, Pedro Sánchez, y de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, tiene todavía que pasar el examen del Congreso, conseguir una mayoría de la Cámara Baja que dé luz verde a la investidura del líder socialista. A falta de cerrar los detalles de ese pacto y el reparto de ministerios y responsabilidades en el nuevo Ejecutivo, el trámite parlamentario cuenta ya a priori con 155 votos a favor, por lo que necesitará sumar a otras fuerzas.
Según establece la Constitución, para ser investido presidente se necesita mayoría absoluta en una primera votación, es decir, el respaldo de 176 diputados, o bien mayoría simple (más votos a favor que en contra) en una segunda. Llegar a los 176 apoyos exigiría a Iglesias y Sánchez sumar a sus 155 escaños un total de 21 votos, lo cual parece muy improbable, ya que se trataría de añadir a formaciones que se han declarado antagónicas entre sí.
A partir de ahí, lo más factible es pensar en la segunda votación, contar con más votos a favor que en contra. Aritméticamente, la opción más sencilla es que el principal grupo de la oposición, el PP con sus 88 diputados (uno de ellos de Foro Asturias), optara por la abstención, aunque esta posibilidad fue rechazada tajantemente por la dirección de los populares.
El acuerdo tendría más fácil salir adelante si contara con el apoyo de Ciudadanos, aunque los naranjas también subrayaron que ni apoyarán ni facilitarán ese posible Gobierno progresista ni. De esta manera, el bloque del no tendrá 162 votos negativos: los de PP; Vox, que ya en campaña se posicionó en contra de un Ejecutivo del PSOE; Ciudadanos; Navarra Suma, que fue la marca con la que se presentaron en la Comunidad Foral Unión del Pueblo Navarro, PP y Cs; JxCat, que ha insistido en el no durante las semanas previas a las elecciones, y la CUP, cuyo lema de campaña es hacer a España «ingobernable» .
PSOE y Podemos deberán, por tanto, tejer apoyos para ir sumando en un Congreso fragmentado con casi veintena de partidos y 21 diputados de 12 formaciones distintas en el Grupo Mixto. A los 155 escaños socialistas y morados, se da por seguro que se sumará el diputado del Partido Regionalista de Cantabria, socio del PSOE, y los tres de Más País y Compromís, así como el de Nueva Canarias, que ya fue socio del PSOE en 2016.
Con esos 159 síes y 162 noes haría falta que otro partido como el PNV o ERC diese el apoyo explícito al candidato socialista en esa votación en segunda vuelta. Así, si los nacionalistas vascos apoyasen a Sánchez y los republicanos catalanes simplemente se abstubvieran, alcanzaría los 166 votos, que superarían a los del bloque del no.
Aún hay otra opción que no demandaría de la participación del PNV, ni del grupo liderado por Gabriel Rufian. Que Coalición Canaria, el BNG y Teruel Existe pasarán de la abstención al sí. Las cuentas serían entonces de 163 votos a favor y 162 en contra. Por contra, si todos los separatistas, estos es ERC, junto a JxCat y la CUP, decida dar la espalda a la investidura de Pedro Sánchez, las cuentas se complican.
Los 10 puntos del preacuerdo:
1. Empleo: Consolidar el crecimiento y la creación de empleo. Combatir la precariedad del mercado laboral y garantizar trabajo digno, estable y de calidad.
2. Servicios públicos: Proteger los servicios públicos, especialmente la educación con el impulso a las escuelas infantiles de cero a tres años y la sanidad. Controlar la extensión de las casas de apuestas.
3. Cambio climático: Lucha contra el cambio climático. Protección de nuestra biodiversidad. Garantía de un trato digno a los animales. Apuesta por la ciencia como motor de innovación económica.
4. Empresas: Fortalecer a las pequeñas y medianas empresas y a los autónomos. Facilitar desde la Administración las bases para la creación de riqueza, bienestar y empleo.
5. Dignidad de las personas: Aprobación de nuevos derechos que profundicen el reconocimiento de la dignidad de las personas como el derecho a una muerte digna, a la eutanasia y la salvaguarda de la diversidad.
6. Cultura y deporte: Asegurar la cultura como derecho y combatir la precariedad en el sector. Fomentar el deporte como garantía de salud, integración y calidad de vida.
7. Feminismo: Lucha decidida contra la violencia machista; el establecimiento de permisos de paternidad y maternidad iguales e intransferibles y la elaboración de una Ley de igualdad laboral.
8. La 'España vaciada': Revertir la despoblación: apoyo decidido a la llamada España vaciada. Impulsar la reindustrialización y el sector primario. Garantizar la igualdad entre todos los españoles.
9. Cataluña: Garantizar la convivencia en Cataluña y la normalización de la vida política. Se fomentará el diálogo en Cataluña, buscando el entendimiento siempre dentro de la Constitución.
10. Fiscalidad: Control del gasto público. Reforma fiscal justa y progresiva que nos acerque a Europa, en la que se eliminen privilegios fiscales y que garantice el equilibrio presupuestario.