La pandemia del coronavirus y el miedo a contagiarse de la población ha hecho que durante el 2020 el número de solicitudes de valoración de la discapacidad presentadas en el Centro Base dependiente de la Delegación Provincial de Bienestar Social haya sido menor que en los últimos años. En concreto, 2020 se cerró con 4.866 peticiones tramitadas, a una media de 50 valoraciones de usuarios vistas por día por los tres equipos de profesionales que se ocupan de este cometido (integrados por médicos y psicólogos, y el apoyo del trabajador social). Esta cifra supone una bajada del 30% respecto al volumen de solicitudes tramitadas en 2019, que fueron 6.941, es decir, 2.075 menos.

Según informó el director del Centro Base de Valoración de la Discapacidad, Rafael García, el número de solicitudes ha ido creciendo progresivamente hasta los niveles medios que había antes de declararse la pandemia, ya que por ejemplo en febrero pasado se registraron 505 peticiones y en diciembre la cifra ya subió a 563, después de meses con apenas registros, como marzo (con 141) o abril ( 126), coincidiendo con los meses más duros de la primera ola de la pandemia.

protocolo. Este cetro como otros oficiales que a diario registran un gran número de visitantes, tuvo que adaptarse a la nueva situación y poner en marcha un protocolo Covid-19, que gracias a la introducción del visor clínico, ha permitido dar salida a una importante lista de espera y resolver demandas de la población por vía telemática. No obstante, se mantiene la vía presencial con la adopción de una serie de mecanismos para la protección de las personas, con cita previa, control de la temperatura, gel hidroalcohólico, que ni siquiera en momentos de menor incidencia de Covid se ha modificado, y «que hasta la actualidad está funcionando a la perfección, teniendo en cuenta que las personas que acceden a este servicio tienen una inmunidad muy frágil».

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