La mayoría socialista tumbó las dos enmiendas a la totalidad a los presupuestos regionales para 2020 registradas por la oposición, por el Partido Popular y Ciudadanos, argumentando que es un ‘corta y pega’ sin argumentos de peso, en el caso de los ‘populares’; y, en el de la formación naranja, que está motivada exclusivamente por la convocatoria electoral de noviembre.
Esta fue la lectura que realizó el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina, que defendió nuevamente las cuentas de la Junta de Comunidades para el año que viene como un presupuesto «solvente y equilibrado entre los ingresos y los gastos», por lo que «el déficit será cero y, por tanto, el incremento de la deuda también será cero».
No obstante, confesó tener una sabor «agridulce», pues «me molesta la utilización y tergiversación de la realidad económica y social de Castilla-La Mancha, pintándola como el apocalípsis e incidiendo en términos que nadie ha utilizado como crisis económica». A su juicio, la oposición emplea estos términos porque «han recibido instrucciones desde Madrid para presentar un clima de crisis de cara a las elecciones».
Sin embargo, celebró poder hablar en un pleno de las «bondades» de un presupuesto que «persigue que la comunidad autónoma pueda seguir creciendo, creando empleo y consolidando el Estado del Bienestar».
Llegan las vacas flacas. El portavoz de Ciudadanos, David Muñoz, denunció que el dinero público sea utilizado «para hacer propaganda» por parte del Gobierno castellano-manchego e incidió en que «ya nadie puede negar que estamos ante una desaceleración económica». Este fue el hilo conductor de su discurso, argumentando que Emiliano García-Page ha elaborado unas cuentas que dan la espalda a la actual situación económica del país y de la comunidad autónoma, con ingresos inflados y demasiado gasto superfluo. «Si esta previsión falla provocarán un agujero en las arcas públicas. Y todo por no ser realistas y reconocer que vienen vacas flacas», dijo Muñoz, que aventuró que el PSOE tapará ese pozo «subiendo impuestos, recortando derechos y servicios y endeudando mucho más a los ciudadanos».
Respecto a la deuda pública de la región y la crítica que recibió del consejero quien expuso que Cs está «demasiado» preocupado por ella, Muñoz reconoció que efectivamente es así, pues Castilla-La Mancha «es la segunda comunidad más endeudada de España», algo que, en su opinión, «lastra» el desarrollo económico de la región. «Recapaciten, están a tiempo, no pasa nada por reconocer que se han equivocado, que arrepentidos los quiere Dios», manifestó el diputado de Cs, que concluyó su exposición con un pasaje de la Biblia: «Entonces conocerán la verdad y la verdad les hará libre».
De su lado, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Miguel Ángel Rodríguez, criticó el electoralismo en el que están bañadas estas cuentas y todo «porque sabían que Sánchez nos iba a llevar de nuevo a elecciones».
Finalmente, el PSOE tumbó las dos enmiendas a la totalidad, por lo que el proyecto de ley de presupuestos del Gobierno continúa su trámite parlamentario. Cs se abstuvo con la enmienda del PP y los populares se abstuvieron con la de Ciudadanos.