Durante el año pasado, la Policía Nacional contabilizó media docena de casos en los que los sanitarios fueron víctimas de agresiones, por parte de los pacientes a los que atendieron o de sus familiares.
En concreto, en Albacete capital se registraron cuatro casos y en Hellín dos casos más, según los datos facilitados por el Cuerpo Nacional de Policía a La Tribuna de Albacete. Todos estos hechos delictivos fueron resueltos por los agentes.
En cualquier caso, la mayor parte de estas agresiones fueron de poca importancia, aunque si se produjo una agresión a un enfermero que realizaba curas a una señora mayor, que fue de más entidad. La agresión fue realizada por parte del hijo de la paciente, que según fuentes policiales «era muy problemático», por lo que se dispuso que cuando fueran a realizar esas curas, se diera aviso a los agentes, de forma que siempre se llevaran a cabo en compañía de agentes del Cuerpo Nacional de Policía, con lo que se logró evitar que se produjeran más problemas.
Para que este tipo de casos no se produzca o al menos se puedan minimizar lo máximo posible, desde el Cuerpo Nacional de Policía se llevaron a cabo el pasado año unas 1.300 reuniones con sanitarios de todo el país, de las cuales una veintena se realizaron en Albacete capital y Hellín.
MÁS INFORMACIÓN EN EDICIÓN IMPRESA