El Real Murcia ganó al Villarrobledo en un partido donde los granas fueron siempre superiores, sólo esbozos del equipo de Castellanos, que se empeñó en jugarle al Murcia por el centro y apenas utilizó las bandas, que es donde verdaderamente sufren los discípulos de Adrián Hernández. También estuvo muy solo durante todo el partido Agus Alonso, apenas pudo hacer nada con la defensa de tres centrales dispuesta por el Murcia, además cuando el Villarrobledo quería ir a la presión, los huecos que dejaban los fueron castigando con goles, en un partido donde el marcador pudo ser otro muy diferente, pues además Víctor Curto y Manolo se encontraron por los palos. Por destacar algún jugador del equipo castellano su dorsal seis Montero, mantuvo el tipo y además de sus botas salieron las mejores ocasiones.
No entró bien el Villarrobledo al encuentro, con una marcha menos y esperando a ver el movimiento que hacía el equipo grana. Un equipo el Real Murcia que salió desde el inicio a buscar la meta defendida por Salcedo, con mucha rapidez arriba y aprovechando la velocidad de Toril, Iván Pérez y Josema el cuadro grana llegaba muy fácil a las inmediaciones del área castellana.

El partido comenzó a coger color, el grana del equipo de Murcia, llegadas y trabajo sin descanso de la zaga visitante. El primer gol llegó en el minuto catorce, buena acción de Josema que recoge un balón en la frontal, se va de cuantos le salen al paso y da el pase de la muerte a Víctor Curto que solo y a placer marca.

El Villarrobledo salió con otra actitud en el segundo tiempo, intentó adelantar la presión y complicar al Murcia la salida, pero cuando uno se decide a hacer una medida de este tipo la tiene que hacer todo en bloque y esto es donde el equipo de Jesús Antonio Castellanos fallaba, unos iban a la presión, los otros no y los agujeros que se iban abriendo por el centro los aprovechaban los murcianistas para ir matando el encuentro. El 2-0 llegaba en el minuto 50, Manolo recupera un balón y avanza por la banda izquierda, Toril se desmarca y recibe claramente el esférico en el área, allí el delantero grana ajustado y por bajo bate a un desesperado Salcedo.

El partido se había roto, maás que por el futbol del Murcia, por el esfuerzo que había hecho el Villarrobledo y que no le permitía mantener una defensa firme. Y así llegó el tercer tanto, conexión entre dos de los recién entrados, Peque se va por banda y centra donde Álex Melgar solo controla y por bajo de nuevo batía a un impotente Salcedo.