Es una cita ya clásica en las actividades de Feria, que este año, a pesar de su suspensión, se mantuvo en el calendario cultural elaborado por el Ayuntamiento, un evento que, coordinado por el Grupo de Folclore Abuela Santa Ana y patrocinado por la Junta de Comunidades, la Diputación, el  Consistorio y Globalcaja, tenía lugar anoche en el Recinto Ferial, a los pies de la Capilla de la Virgen de los Llanos.

Alberto Montesinos, director de Abuela Santa Ana, reconocía que en este último año tuvieron menos ocasión de llevar a cabo su trabajo de campo por los pueblos para ir documentando todo aquellos digno de rescatar, pero aún así lograron hallar un par de prendas originales que mostraron al público, concretamente dos basquiñas, faldas que se colocaban tradicionalmente sobre lo refajos «y de la que hemos buscado documentación escrita, apareciendo la primera nota en la que se habla de su uso y características en 1567 y otra en la segunda mitad del XVIII, donde se especificaba que se utilizaría para actos de Iglesia y siempre tendrá que ir acompañada de mantellina, por el decoro de la mujer».

Profundo estudioso de la indumentaria tradicional, Montesinos se centró en «el poderío y diversidad de nuestra indumentaria» y alentó a los ciudadanos a salir con su atuendo popular y a ir bien vestidos a la manera tradicional, «porque tenemos un gran traje que debemos cuidar, no es un disfraz para ponerlo de cualquier manera, porque tiene tanto mérito y se merece el mismo ceremonial que se práctica en Valencia, debemos valorarlo de la misma forma».

Tras incidir en esa necesidad de dignificar esta indumentaria, «porque es parte de la cultura de nuestra tierra», explicó las distintas partes y elementos de los trajes lucidos por miembros del Grupo, al tiempo que el acto era amenizado por los músicos de la cuadrilla y grupo de baile con músicas y danzas populares, como malagueñas, pardicas, fandangos, seguidillas, jotas y manchegas.

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