El cuadro albacetense salió muy fuerte y endosó un 16-3 que sentó como una losa para un conjunto catalán que no sabe competir cuando juega de visitante. A pesar de su cómoda ventaja, los jugadores del Albacete Basket mantuvieron la concentración durante todo el encuentro, apoyados en jugadores como Anton, que masacró desde el triple al CB L’Hospitalet y acabó con 16 puntos como el máximo anotador. Varela aprovechó para darle minutos a todos los jugadores, tras comprobar que el partido estaba ya muy encarrilado al llegar al descanso con un claro 49-22.
La ventaja en el último cuarto ya era de 33 puntos y el joven Joaquín Quijada consiguió sus primeros puntos con un triple en la recta final del choque, en el que la afición pudo regresar al Pabellón del Parque.