Piden más residencias específicas para enfermos mentales

T.R
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El 32% de los pacientes del centro comunitario llevan como residentes desde la apertura del centro comunitario de Afaeps en la capital, en 2009

Varios usuarios acceden a la residencia comunitaria de Afaeps. - Foto: AFAEPS

Hace ahora 10 años abría sus puertas en la ciudad la residencia comunitaria para enfermos mentales gestionada por la Asociación de Familiares y Amigos de Enfermos Mentales (Afaeps), destinada a aquellas personas con diagnóstico de enfermedad mental, especialmente aquellas que aunque cuentan con apoyo familiar, por diferentes circunstancias, se hace necesaria su salida de su entorno para avanzar en su proceso de recuperación, así como otras que viven solas pero están en situación de exclusión social. En su día empezaron 44 residentes, de los que el 32% siguen viviendo en este centro residencial; otros en cambio, tras completar su plan de recuperación, han podido retornar a la comunidad.

Para conmemorar este décimo aniversario, la asociación celebrará hoy un acto con residentes, trabajadores, familiares y voluntarios.

El director de este recurso, Javier Ortega, recordó que la puesta en marcha de esta residencia comunitaria fue un hito para Afaeps, tras años de reivindicaciones para que se hiciera realidad. Sin embargo, la cifra de personas que precisan de este recurso ha seguido creciendo y con ello la lista de espera de este recurso especializado único en la provincia, motivo por el que Ortega insistió en que sigue siendo necesario dotar a la provincia de más recursos especializados de este tipo para la atención del colectivo.

Gracias a la residencia comunitaria 174 personas con diagnóstico de enfermedad mental han sido atendidas y la intervención de los profesionales con cada uno de ellos ha posibilitado en estos 10 años su  proceso de recuperación.

plan a medida. «El grado de satisfacción de las personas que han pasado por este dispositivo es alto, porque lo más importante es trabajar con ellos a nivel individual. No hay ningún residente igual y además cada intervención es diferente, acorde con el proceso vital de recuperación de cada uno de ellos».

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