Si hablamos de su experiencia en Chicago, nos damos cuenta que es usted bastante nómada.

Soy de Casas Ibáñez, estudié muy joven en Andalucía, Ciencias Ambientales, siempre he sido músico. Ahora me acabo de doctorar en jazz moderno y una de mis actividades en Chicago fue terminar el doctorado. Pero a mí, no me quedó más remedio, cuando empezaba, que buscar y después de Granada hice una residencia de un año en Copenhague, pero antes ya estuve otro año en Inglaterra y recientemente, Valencia, Granada, Madrid y finalmente otra residencia de investigación en el Conservatorio de Ámsterdam y de ahí, a Chicago.   

¿Por qué escogió Chicago?

Llevaba un tiempo queriendo ir a Estados Unidos, a la fuente. Al cabo de los años, salió la posibilidad de ir a una ciudad como Chicago. En jazz siempre se habla de Nueva York, capital del jazz internacional, pero desde una perspectiva histórica, Chicago desarrolló un papel fundamental en el jazz clásico y más adelante, con Sun Ra, desarrollaron una serie de tendencias de vanguardia que están muy presentes en la ciudad. En Chicago comprobé, de primera mano, esa relación entre el jazz clásico, el blues genuino, y las vanguardia, la línea en la que estoy interesado desde hace tiempo.  

Éste es su cuarto trabajo, ¿cómo fue esa evolución?

Mi primero y tercer disco estaban dedicados a los estándares, de grandes autores, esto es habitual en el jazz, pero investigando en arreglos y armonías. Entre esos dos, saqué otro disco en el que experimentaba con composiciones propias, con tendencias del flamenco y la música andalusí, con instrumentaciones no habituales. En  Blue Shots From Chicago, hay un salto importante, considero que encontré una veta creativa importante, temas y arreglos míos, y la aproximación que hacemos es mucho más avanzada, tendente a la improvisación, dentro de unos cánones. En este disco encontré una senda.     

¿Hacia dónde va esa senda?

En Chicago, auné esfuerzos y desarrollé la parte más jazzística y más blusera. Escogí dos o tres composiciones que ya tenía, las retoqué  y añadí otras de corte nuevo, concebidas completamente en Chicago. Orienté la composición a lo que yo quería y el disco parte de cánones clásicos, pero las formas se hacen elásticas, la aproximación es completamente vanguardista y avanzada y trabajo con elementos sonoros no habituales. He jugado con la recombinación de elementos desde una perspectiva diferente, no es algo novedoso, pero en mi caso si es novedoso el resultado, a nivel creativo.  

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