El insomnio crónico puede afectar a 5,4 millones de españoles

M.G.
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Un estudio de los miembros de la Sociedad Española del Sueño (SES), con Manuel Entrambasaguas a la cabeza, desvela que el insomnio crónico se ha duplicado y afecta al 14% de la población. La afección se ha disparado entre la población joven

El neurofisiólogo Manuel Entrambasaguas durante su intervención sobre las conclusiones del estudio. - Foto: David Pérez

Pasar parte de la noche en vela de manera habitual es una de las afectaciones que más preocupa a la ciudadanía en los últimos años. Los expertos llevan años estudiando la calidad del sueño de los españoles porque el insomnio puntual o crónico se ha disparado y trae de cabeza a los médicos y especialistas.  Sin ir más lejos, un grupo de expertos, con el neurofisiólogo del Hospital Clínico de Valencia, Manuel Entrambasaguas como principal autor, desvela que el insomnio crónico se ha duplicado en los últimos veinte años y podría afectar a 5,4 millones de españoles.

Las conclusiones de este estudio, realizado en colaboración con Exeltis España, a la luz en el marco del XXXI Congreso de la Sociedad Española del Sueño (SES) que se está celebrando en el edificio de Eurocaja Rural en Toledo,  apuntan que el 43,4% de la población tiene síntomas de insomnio en alguna ocasión, si bien, lo que llama la atención del  experto es que los jóvenes entre 18 y 34 años resultan los más afectados. En este caso, Entrambasaguas, subrayó que se trata de un incremento «brutal» porque el insomnio en este grupo de edad «antes no existía».

Además, el neurofisiólogo experto en medicina del sueño también explicó esta mañana que el síntoma más frecuente es levantarse temprano  por la mañana y subrayó que los problemas relacionado con el sueño suelen afectar «mucho más» a los hombres que a las mujeres.

Respecto al insomnio crónico, que ya afecta a un 14% de la población si se toma como referencia el estudio anterior, que data de 1999,  aseguró que el porcentaje no es del todo real porque habría que sumar otro 4,8% más de población que no figura en las estadísticas a pesar de sufrir esta afección porque toma medicación para combatirlo. Si bien, ahí la tendencia se invierte y son las mujeres las mayores consumidoras y en tratamiento farmacológico, habitualmente con lorazepam y diazepam.

Entrambasaguas advierte que el tratamiento farmacológico no está exento de efectos secundarios, sobre todo, en la población mayor y tiene claro que hay un déficit en el seguimiento y control de los pacientes. En este contexto, el estudio, realizado a partir de 2.243 entrevistas realizadas en 2018 y 2019, indica también que el 25% de la población que se medica para dormir continúa teniendo problemas para conciliar el sueño y un 18% está convencido de que sin tratamiento podría dormir bien, pero no lo deja por habituación. 

Respuesta. Al margen de las cifras que se pueden relacionar con los problemas de insomnio, los expertos van mucho más allá y relacionan la problemática con un mayor estrés, con los horarios laborales, los turnos de trabajo disruptivos y la conciliación familiar. El neurofisiólogo considera que son factores comunes que comparten los paíes industrializados, pero añadió que el uso de los  dispositivos móviles antes de irse a la cama también puede tener relación porque nos encontramos «acelerados e hiperconectados».

En principio, Entrambasaguas  recordó que desde la Sociedad Española del Sueño se aconseja la terapia cognitivo conductual como primera opción, por encima incluso del tratamiento farmacológico, y una serie de recomendaciones y costumbres que contribuyan a lograr una buena higiene del sueño, como un entorno adecuado para dormir, horarios regulares para acostarse y levantarse. También resulta beneficioso realizar ejercicios de relajación y meditación.