Bajo el título Stop Cáncer y el eslogan Ayúdanos a investigar, ayúdanos a curar, un grupo de diez investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha y la Gerencia de Atención Integrada de Albacete han lanzado, a través de las redes y de la página  web de la UCLM una campaña para recaudar fondos con los que poder avanzar en la investigación de los tumores cerebrales. En menos de una semana han dado el primer paso, recaudar el 20% de los fondos que se pretendían, es decir, 5.000 euros, aunque su meta es alcanzar los 25.000 euros, cantidad con la que aspiran a contratar a un investigador por un período de un año. 

Los investigadores Eva Galán Moya, María del Mar Noblejas López, Raquel López Rosa, David Tébar García, Alejandro Pinedo Serrano, las cirujanas Esther Sánchez López, Ana Sánchez Mozo, los oncólogos Juan Antonio Méndez García y Encarna Adrover Cebrián, así como la patóloga Rosa Barbella Aponte forman parte del equipo que entre la UCLMy el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete han estrechado lazos, a camino por tanto entre la investigación básica y su aplicación a la clínica.

La investigadora Eva Galán, bióloga y doctora en Biomedicina de la UCLM, recordó que si bien este grupo de investigación traslacional cuenta con financiación nacional para las líneas de cáncer de mama que tienen en el laboratorio, no ocurre lo mismo con la línea de investigación sobre tumores cerebrales, «para la que no contamos con fondos estables».

A pesar de los avances experimentados en la comprensión de la biología del cáncer cerebral, «las opciones de tratamiento para las personas afectadas de un gioblastoma siguen siendo hoy en día muy limitadas», tal y como apuntó la doctora Galán, que insistió en «hablamos de cáncer cerebral porque queremos aunar los tumores cerebrales en sí mismos y la metástasis cerebral de las pacientes con tumores mamarios».

De esta forma, los científicos se centran en estudiar las metástasis de cáncer de mama triple negativo y por otro lado analizan uno de los tumores cerebrales más agresivo como es el gioblastoma multiforme. «El gran problema de estos tumores es que no existe ningún tratamiento que consiga alargar la esperanza de vida más allá de los 15 meses que es la media de supervivencia de estos pacientes».

Tan negativo es el pronóstico de este tipo de cáncer que sólo uno de cada 20 afectados sobrevive pasados los cinco años del diagnóstico, y aunque, según la investigadora Eva Galán «se ha investigado mucho en los últimos años sobre estos tumores no se ha logrado mejorar la tasa de supervivencia».

Tratamiento. La doctora Galán explicó que en estos momentos este equipo de científicos del que forma parte ya está ensayando nuevas combinaciones de fármacos y buscando nuevos marcadores en estos tumores que puedan ayudar a desarrollar estrategias orientadas a mejorar la medicina personalizada en esta patología. Para ello cuentan con un buen circuito, que incluye el diagnóstico por los oncólogos, la cirugía por parte de los cirujanos y el envío de las muestras por parte de los patólogos. «Gracias a estas muestras estamos desarrollando modelos celulares y animales, lo que llamamos ratones avatares, para evaluar estos tratamientos en los animales antes que en los pacientes y así poder predecir la respuesta a los fármacos».