"La Paderewski es un premio muy importante para mi carrera"

A. Díaz
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Pedro López Salas, ganador del segundo premio en una de las competiciones de piano más prestigiosas del mundo, afirma que en estos momentos "me interesa centrarme en Chopin"

El joven pianista albacetense, Pedro López Salas. - Foto: International Paderewski Piano Competition

Pedro López Salas está de enhorabuena. Ha ganado el segundo premio en una de las competiciones de piano más prestigiosas del mundo, la Paderewski International Piano Competition. Además, ganó cuatro premios adicionales, el premio al mejor recital de semifinales y tres conciertos organizados por prestigiosas competiciones, el Concurso de Piano Arthur Rubinstein, el Concurso de Piano Liszt de Utrecht y el Concurso de Músicos de Viena Tión. El pianista comentó a La Tribuna de Albacete qué supone este nuevo triunfo.

¿Un premio muy especial?

Así es, la Paderewski International Piano Competition de Polonia es la   Champions League del piano, así que es un premio muy importante para mi carrera, una oportunidad de conciertos, estoy muy contento.

Se trata de un concurso con muchas fases.

Así es, es un concurso bastante largo. Primero tiene una preselección con distintas sedes y, en mi caso, elegí Viena, en junio. Estuvimos probablemente 500 personas y como tiene sedes en todos los continentes, imagino que serían muchísimas. En agosto nos comunicaron que estábamos aceptados 42 pianistas. A partir de ahí comencé con la preparación y el concurso en sí comenzó en noviembre. Viajamos el día 5 a Varsovia, aunque yo lo hice desde Florencia, porque ofrecía allí un concierto el día 3. Fui después a Bydgoszcz y el día 6 tuvimos la elección de piano, porque en estos concursos los hay de distintas marcas, tienes un tiempo para probar y puedes elegir en el que quieres tocar durante el concurso.

¿Eligió el que toca normalmente?

Curiosamente no fue así. En el momento de probar fue el que más me gustó, un Fazioli. Eran todos pianos excelentes y la verdad es que yo les pedí un poco de tiempo para decidir, estuve pensándolo bien, porque es el piano en el que tocas durante todo el concurso, que no es precisamente corto. Al final creo que tomé una muy buena decisión porque el Fazioli es un piano increíble, que me permite un rango de dinámicas y coloraturas muy amplio y estuve muy cómodo. Allí están todos los representantes de las distintas marcas y una vez que eliges piano, la marca que eliges te acoge y te apoya. La relación fue muy buena con la gente de Fazioli, fue genial.  

¿Cuántas fases en el certamen?

Hice una primera fase de una media hora, que se hizo en cuatro días. La segunda fue de tres días y la siguiente es como dos semifinales, la A fue un recital de piano solo de una hora y la B, un concierto para piano y orquesta de Mozart. Toqué una tarde el Concierto número 21 y la mañana siguiente el recital, con una obra obligada compuesta para el concurso, Atlantiss, de Kulenty. Además elegí El pelele, de Granados y otra pieza de Schumann. De ahí pasé a la final,  con ensayos con la orquesta sinfónica. En la prueba final elegí el  Concierto para piano número 1, de Liszt y la verdad es que es un gran concierto. Me hubiera gustado elegir alguno de  Prokófiev o de Rachmaninoff, que suelo tocar en los concursos, pero por el tema de Rusia se cayeron para tocar en la final los compositores rusos. Bueno, el de Liszt es un gran concierto y fue muy bien con la orquesta.