El jugador del Real Madrid Vinícius volvió a estar en el ojo del huracán en un campo de fútbol, al ser objeto de insultos racistas por parte de unos aficionados del Valencia, y acabar expulsado por agredir a un contrario.

Un suceso que este miércoles se acabó colando en el mitin electoral que Emiliano García-Page celebró en Cabanillas del Campo (Guadalajara) a tan solo cuatro días de las elecciones autonómicas y locales del 28 de mayo. A bote pronto, el deporte y la política no tienen mucho en común, pero el presidente de Castilla-La Mancha recordó que en ambos espacios se producen hechos que deben ser condenados. "Ni los deportistas deben acostumbrarse al paisaje del racismo ni los políticos debemos ser la diana perfecta para el desahogo de muchos", explicó Page que consideró que en esto último "buena parte de culpa la tienen los partidos políticos".

Insistió en que en su sueldo no está que "le mezclen con Otegui" como está haciendo el Partido Popular de Castilla-La Mancha con vallas publicitarias en furgonetas que va paseando por la región, "ni que manipulen vídeos" con sus palabras. Dicho lo cual, informó de que su partido ha identificado "más de mil vídeos del PP manipulando, ofendiendo e insultando", a lo que se preguntó que "por qué no han hecho mil vídeos con propuestas en lugar de insusltarme".