La plaga de la avispilla del almendro se adelanta en Albacete

E.F
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La Estación Regional de Avisos Agrícolas confirma la aparición de los primeros adultos en explotaciones situadas en Fuensanta, La Roda y Villamalea a causa de las altas temperaturas

La imagen muestra varias almendras en las que ya está presente la plaga en diferentes estadios. - Foto: CARM

La Estación Regional de Avisos Agrícolas (ERAA)acaba de confirmar la primera salida de ejemplares adultos de avispilla del almendro en municipios del norte de la provincia de Albacete, sur de Cuenca y oeste de Ciudad Real.

Así consta en el último Boletín Fitosanitario hecho público por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, que en el caso de Albacete menciona los términos muncipales de La Roda, Fuensata y VIllamalea.

En la misma publicación, también aparecen los nombres de Tomelloso, en la provincia de Ciudad Real, y de Casas de Fernando Alonso, El Herrumblar, Iniesta y Villagarcía del Llano, todos ellos situados en la provincia de Cuenca.

«Las temperaturas registradas a finales de febrero y principios de marzo, más elevadas de lo que corresponde a estas fechas han contribuido a una adelanto de la emergencia de adultos», se reconoce en el mismo Boletín.

Los técnicos de la ERAA esperan que haya nuevas salidas de ejemplares adultos «en las próximas semanas» en más municipios en función de las condiciones meteorológicas. También dan una serie de pautas para  vigilar esta plaga.

«Para el control de esta plaga se recomienda el seguimiento del período de salida de adultos, para proteger el cultivo durante este tiempo y que se haga a nivel de parcela» a través de una serie de medidas a aplicar por el agricultor.

En primer lugar, es «imprescindible» el seguimiento de la salida de los primeros adultos mediante trampas que se deberán revisar cada dos o tres días. También se recomienda vigilar la presencia de almendras «momificadas».

Estas almendras deben abrirse  para comprobar si tienen avispilla en su interior, sea en estado de larva, pupa blanca o pupa negra, que es la fase inmediatamente anterior a la salida del adulto. También se verificará si hay agujeros de salida.

La colocación de trampas es fundamental porque «el inicio del tratamiento vendrá determinado por la salida de los primeros adultos», entre tres y cinco días después de que se produzcan las primeras, remarca la ERAA.

Se recomienda ponerse en contacto con la Agrupación de Sanidada Vegetal (ASV) «para obtener información directa de la presencia y el seguimiento de la avispilla» donde se encuentre la explotación. 

Por último, a los apicultores se les pide dar cuenta de la proximidad  de sus colmenas a los titulares de parcelas de almendro cercanas.