La segunda derrota consecutiva del Bueno Arenas Albacete, penúltimo, se produjo contra uno de los "gallitos" de la categoría, el ICG Força Lleida (89-79). El adverso resultado fue la consecuencia lógica de viajar a remolque durante casi todo el encuentro. La caída al "farolillo rojo" es una amenaza de cara al duelo del domingo del Melilla Sport Capital.
Los primeros minutos demostraron lo complicado del duelo del Barris Nord, si bien el cuarto inicial transcurrió equilibrado y en el que las defensas hicieron sufrir a los sistemas ofensivos. Primaron los errores, las imprecisiones y los centímetros hasta los últimos instantes del primer cuarto. Ahí fue cuando empezó a manejarse con soltura el quinteto local, capaz de desnivelar la balanza con un parcial 7-2. Ese breve instante sirvió al cuadro ilerdense para orientar los primeros pasos de su victoria, máxime cuando Lobo deshizo la defensa organizada por David Varela con balones doblados y constantes penetraciones en superioridad. Tan solo Ferrando se encargó de mantener la esperanza de vida de una formación que sufrió mucho antes del paso por los vestuarios. El base valenciano ejerció de timonel con su acierto anotador y su fortaleza defensiva hasta el regreso al parqué.
Y es que lejos de tirar la toalla, Raitanen decidió cargar sobre sus espaldas la responsabilidad de meter al Bueno Arenas de nuevo en la pelea. El manantial finlandés permitió llegar a la distancia mental de los cuatro puntos de desventaja después de un triple anotado libre de marca a cargo de Moreno a falta de poco más de un cuarto de hora del final del partido (46-42, min. 25).
No necesitó más avisos el Lleida para recuperar su quinteto de gala y propiciar un nuevo demarraje que sí se tornó en definitivo. El tridente formado por Urtasun, Lobo y Bakovic ejerció de puntal. Al déficit de defender el pase extra se le sumaron la falta de ideas en ataque y un fondo de armario muy escaso que impidió afrontar con garantías y piernas frescas el exigente tramo final del partido.
Al último cuarto entró el Bueno Arenas 16 puntos por debajo (60-44). Los dos equipos padecieron una eliminación por acumulación de faltas personales. Ni con ésas extrañó la facilidad con que el ICG Força Lleida dejó visto para sentencia el pulso aunque el último cuarto, el de mayor anotación, con mucha diferencia sobre los otros tres, fue el único favorable a los visitantes.
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