El Villarrobledo atraviesa por una situación extraordinariamente delicada después de su derrota con el Marchamalo (0-1) que le sitúa a un solo punto de los puestos de descenso a Primera Preferente.
La marejada interna es importante, hasta el punto de que José Luis Fuentes, entrenador del equipo, se mostró muy disconforme con el proceder del club por lo que respecta a la confección de la plantilla y el resultado del mercado de invierno. "Tenemos muy pocos efectivos y quedan siete partidos, que el club vaya al mercado y traiga efectivos continuemos o no nosotros porque es importante que el equipo se vea con mimbres suficientes para ganar en cualquier lugar. Estamos mermados desde hace mucho tiempo y no se ve las orejas al lobo hasta que nos encontramos en esta situación, llevamos mucho tiempo avisando de que esto podía suceder, ha sucedido, no lo hemos visto y ahora vendrán las urgencias", declaró Fuentes al término del encuentro, para precisar: "El fondo de armario es muy poco, tenemos tres centrocampistas activos, no hay laterales sustitutos, hay muchas carencias en la plantilla y en la planificación, y sólo lo vemos a estas alturas. Yo no manejo la economía del club ni la quiero manejar, pero no han invertido ni han dejado de invertir en diciembre y enero".
También se refirió el técnico a la presión y afeó a la entidad que se la haya pusto "en el disparadero". "En el cuerpo técnico no somos perfectos, somos personas, pero durante la semana afrontamos el partido como una auténtica final a partir del viernes. Se nos ha puesto en el disparadero simplemente porque el club así lo ha querido y, aunque tengamos cosas buenas y malas, estamos orgullosos del trabajo que realizamos, tenemos la conciencia muy tranquila y el que está dentro sabe realmente lo que hay, lo que hacemos y cómo trabajamos por el club. Los resultados no están acompañando y que sea lo que tenga que ser, pero nosotros seguiremos luchando por el club hasta el último día porque nos enorgullece defenderlo", aseguró.
"Mi puesto peligra a raíz de que el club prácticamente nos puso un ultimátum encima de la mesa trasladándonos que éramos los culpables de la situación. Somos responsables como todas las áreas del club, pero nunca culpables porque hay muchas más cosas que pueden tener más culpabilidad que nosotros. Si se toma una decisión será cosa del club, pero nosotros estamos muy contentos con lo que hacemos, entiendo que los resultados no acompañan y que en el fútbol puede venir un nuevo entrenador que sirva para los dos o tres primeros partidos, pero para después no servirá de nada. Nosotros continuaremos trabajando hasta donde nos dejen", concluyó Fuentes.