Cualquier excusa es buena para darse un chapuzón y las altas temperaturas de este verano, sobre todo las de julio, han invitado a muchos bañistas a pasar por las piscinas municipales. El calor obliga a ponerse a remojo para mantenerse fresco y llevar mejor las olas de calor, que han sido varias en los meses de verano, con temperaturas que superaron los 40 grados durante muchos días consecutivos.
Las instalaciones pertenecientes al Instituto Municipal de Deportes (IMD) abrieron sus puertas entre el 18 y el 24 de junio y, desde entonces, viven una época estival sin incidentes graves, pues aunque en el complejo del Carlos Belmonte cayó un pino de grandes dimensiones sobre la piscina mediana lo hizo durante la noche y no hubo que lamentar daños personales.
Desde el inicio de la temporada  y hasta el cierre del mes de julio, 142.923 usuarios acudieron a las zonas de baño públicas, lo que supone un aumento del 2,2% y del 0,6% con respecto al mismo periodo de 2019 y 2018, respectivamente. En concreto, se contabilizaron 139.785 usuarios en 2019 y 142.040 en 2018 en mes y medio, según los datos facilitados por el Ayuntamiento de Albacete.
Las piscinas abrieron sus puertas en 2020, con numerosas restricciones debido alCovid, y también lo hicieron en 2021 rebajando las mismas, aunque había algunas, como el aforo en el vaso de la piscina limitado al 75% y espacios divididos en las zonas de playa. En el primer mes y medio de apertura de las piscinas en 2021 se contabilizaron tan solo 51.753 bañistas. Nada que ver con los usuarios de una temporada normal.

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