Diego Sáez toca y canta y aprovecha su jubilación para hacer lo que más le gusta. Le explica a La Tribuna de Albacete lo que más le gusta que es actuar. 

¿Cómo ha llegado usted aquí?

Me ha gustado la música y cuando me jubilé mi mujer me dijo que podía empezar a cantar algo por ahí, entonces me apunté a cursos y estuve aprendiendo, también a guitarra, y lo que podía lo iba haciendo. 

¿También tiene karaoke en casa?

Sí, claro, porque canto copla en varios sitios, en las residencias, en algún pueblos como Minaya, Masegoso, en la Feria de Albacete estuve cantando en la Universidad Popular, en el Jardín Botánico, en el  Altozano. Tengo una buena profesora que es Yaraví Serrano , estuve antes con Nieves Navarro, que es una excelente cantante. He ido aprendiendo lo que ella me dijo y avancé bastante.  

¿Cuándo empieza de que la música le llena mucho y de que era su presente?

Siempre me ha gustado cantar, siempre he cantado de joven en los bailes y todo eso cantaba por Antonio Molina, también en verbenas, pero empecé con 17 años y ahora tengo 73. También tenía un tío que cantaba que se llamaba Antonio Sáez. 

¿Cómo empezó a cantar?

Siempre cantaba en el camión cuando estaba trabajando. Canciones que no me sabía y que tenía unas cisternas de Repsol butano y ahí iba yo por el camino hasta que se me hacía más corto. Iba a Escombreras y escuchaba a los cantantes que siempre me han gustado como Antonio Molina, del que destacaría su elegancia y que tira siempre al flamenco y me gusta Senda del viento, Salamanca, Adiós lucerito mío, La Paloma blanca, Manolo Escobar canto mucho Madrecita, madre del Carmen, Los Mayorales. 

¿De todo lo que ha hecho hasta hoy de qué se siente más orgulloso?

Me siento muy orgulloso de cantar para los mayores. Ellos se encuentran muy a gusto, porque la copla le gusta mucho a la gente mayor. A mí me gusta mucho hacerle disfrutar.  

¿Qué piensa cuándo ve el aplauso del público?

Para mí los mayores es lo más importante que veo hoy porque saben valorar la música y te lo agradecen mucho. En un caso había una señora de 102 años que se levantó sin poder y fue a mí y se puso a llorar y a mí me dio una gran emoción por la alegría que tenía la mujer, porque lo había vivido de joven y lo estaba perdiendo. 

Es lo importante de la música que lo transporta mucho, ¿verdad?

Totalmente. Es lo importante, porque ves a la gente disfrutar con las canciones que cantamos. Voy con tres chicas y yo, que se llaman Mercedes, Yolanda y Carmen que es con las que canto y a las que conocí en la UP.  

¿Está en varias rondallas?

Me llevaba muy bien con él. Me metí en una rondalla muy buena que hay en Albacete y me dijo que me fuera con él y ahí voy aprendiendo lo que puedo, porque llevo tocando la guitarra seis años. En la Rondalla Renacer estoy muy bien, pero también estoy en el coro del Ávila, donde toco la guitarra y canto pasodobles y hay mujeres y hombres. 

¿Cómo se hace la música cuando actualmente canta con sus compañeras?

Los grandes artistas llevan la música como yo. En los pueblos las coplas llegan a todo el mundo, aunque la verdad es que la copla se está perdiendo, pero hay artistas como Miguel Poveda que la están rescatando. 

¿Cómo piensa que se podría rescatar?

Sacándola en televisión, en el periódico y hacer que la gente disfrute a tope con la copla que es una maravilla.