La productividad laboral sigue siendo una asignatura pendiente en España, especialmente tras la reforma impulsada por el departamento de Yolanda Díaz, cuyos efectos parecen empezar a notarse ahora. Y es que, el nivel de eficiencia medio en el país se situó al comienzo de este año en 54,40 puntos, lo que implica una reducción de 4,38 puntos porcentuales respecto al año anterior, según se desprende del recientemente publicado II Barómetro Adecco Outsourcing sobre productividad y eficiencia.

El director comercial de Adecco Outsourcing, Daniele Tramontín, señala que las variables que más han influido a la baja en esta edición son todas aquellas que se refieren a la capacidad de hacer una correcta gestión de los recursos humanos y responsabiliza de ello a la reforma laboral de finales de 2021, «cuyos efectos reales están aflorando de manera más significativa en este arranque de año».

Al respecto, el responsable de The Adecco Group Institute, Javier Blasco, agrega que España «sigue a la cola de los países de la Unión Europea en recuperación económica y pérdida de productividad», una «constante» desde la crisis financiera desatada en 2007.

«El crecimiento de nuestra productividad, y por ello de la competitividad de nuestra economía, depende de que se frene la elevada presión fiscal, tanto en impuestos como en cotizaciones a la Seguridad Social, si es que queremos atraer inversiones que mejoren nuestro tejido productivo y nuestros retos tecnológicos», recomienda en un momento en el que la ofensiva fiscal no ha parado de crecer con la llegada del actual Gobierno.

El II Barómetro Adecco Outsourcing se realizó con las respuestas de 2.039 directores, mánagers y mandos intermedios en 30 sectores de actividad representativos del tejido empresarial español. El resultado fue una puntuación de 54,40 puntos en una escala de cero a 100. Según el informe, un 19,13% de las compañías tiene un nivel de productividad nula, seguido de un 12,51% que tiene una eficiencia muy baja. A ellas se suman un 12,31% con una eficacia moderada, un porcentaje similar (12,56%) en las que es alta. Solo en el caso del 5,49% de las empresas nacionales es muy alta, mientras que el 18% considera que tiene un rendimiento sobresaliente, un dato que ha bajado seis puntos porcentuales respecto a 2022.

Según el análisis, las empresas de menos de 10 empleados son las que se encuentran por debajo de la media, con 43,62 puntos, y las más eficientes son las de 250 a 1.000 personas en su plantilla, con 60,47 puntos. Las de más de 1.000 trabajadores tienen un indicador de productividad de 57,86 puntos.

En las preguntas a los directivos, mánagers y mandos intermedios, el 60,13% valora la productividad de su compañía con una nota entre siete y 10. Por su parte, los empleados mayores de 35 años y los que trabajan en el sector industrial e IT y audiovisual la evalúan de forma más positiva, haciéndolo con una media superior a la global.

Por sectores, aquellos con mayor eficiencia y con más sensibilidad hacia la productividad son banca y seguros (64,85 puntos), alimentación (62,65) e IT (61,85). También cuentan con una buena puntuación la automoción (61,79 puntos), el ámbito químico (61,78), el de aeropuertos (61,41) y el industrial (61,06).

Salud y objetivos

El barómetro también analiza la salud laboral, que cada vez tiene más peso en las políticas de las firmas. Así, cerca de la mitad de las empresas consultadas, un 48,75%, analiza KPI (indicadores clave de rendimiento) relacionados con este ámbito, aunque cae 2,73 puntos porcentuales. Asimismo, más de ocho de cada 10 encuestados afirman realizar campañas de promoción de la salud (81,79%).

En cuanto a acciones concretas, casi el 60% de los directivos afirma haber puesto en práctica mejoras en ergonomía en procesos de producción. Son las compañías de más de 250 empleados y las que pertenecen a los sectores de alimentación, industrial, IT y audiovisual y transportes, en mayor medida que el resto, que han llevado a cabo mejoras en ergonomía en procesos de producción.

Por otro lado, el 65% aplica la retribución variable sobre objetivos o productividad independientemente del convenio laboral de aplicación, aunque disminuye en 3,94 puntos porcentuales. Menos de la mitad lo aplican a todos los empleados vinculados al proceso.