Las inspecciones farmacéuticas aumentan un 42% en 2022

Teresa Roldán
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La vigilancia realizada por los profesionales en las boticas durante el ejercicio pasado acabó con cuatro expedientes sancionadores

Una de las inspectoras de trabajo del equipo de la Delegación de Sanidad durante una inspección en una farmacia - Foto: José Miguel Esparcia

Anualmente la Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Planificación, Ordenación e Inspección Sanitaria, aprueba el Plan de Inspección de centros, servicios y establecimientos sanitarios. El último que está en vigor en estos momentos para todo el 2023 recibió luz verde mediante resolución publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha el pasado 2 de febrero.

De esta forma, el equipo de la sección de inspección farmacéutica de la Delegación Provincial de Sanidad, integrado por cinco profesionales, y bajo la jefatura de Sección de Inmaculada Planelles Miranda, realizó durante el pasado año, con arreglo al plan vigente de ese ejercicio, 335 visitas de inspección, frente a las 236 inspecciones del año anterior, lo que representa un aumento del 42% en las visitas realizadas por el equipo inspector.

Entre las funciones de estos profesionales figura la tramitación de expedientes y visitas de inspección en establecimientos que tengan que ver con medicamentos y con productos sanitarios, como son las oficinas de farmacia y botiquines, servicios de farmacia hospitalaria, depósitos de medicamentos, almacenes de distribución de fármacos, centros donde se dispensan medicamentos veterinarios, óptimas, ortopedias, establecimientos de audioprótesis, laboratorios de prótesis dental, laboratorios de análisis clínicos y áreas de obtención de muestras, fabricantes de productos sanitarios a medida y almacenes de distribución de fármacos y de productos sanitarios. En total el censo sobre el que desarrolla su labor de vigilancia e inspección farmacéutica en la provincia de Albacete este equipo está compuesto en la actualidad por 469 establecimientos abiertos en 2023.

En concreto, de las 335 inspecciones farmacéuticas realizadas en la provincia el pasado año, 143 fueron en farmacias, 88 de ellas por programas de inspección. Como consecuencia de ello se abrieron cuatro expedientes sancionadores (dos relativas al plan de inspección y otras dos por denuncia, dos por venta de test de Covid no autorizados por la agencia y dos por fraude en la prestación farmacéutica).

Teniendo en cuenta que el Plan de Inspección tiene por objeto velar por la calidad y la seguridad de la atención que se presta a los ciudadanos en los centros, servicios y establecimientos sanitarios de la región, y dada la complejidad y diversidad de establecimientos se establecen prioridades en la labor de inspección; y al margen de este plan actúan a demanda y requerimiento de los propios establecimientos. En concreto, los inspectores farmacéuticos se ocupan de tramitar las aperturas o cierres de nuevas oficinas de farmacia, de vigilar las condiciones en las que realizan algunas de ellas fórmulas magistrales para ver si cumplen con la normativa, al igual que en el caso de las que preparan SPD (sistemas personalizados de dosificación de medicamentos a pacientes), también se controlan las guardias, sustituciones, regencias, permutas, horarios, etc.

Otro de los cometidos en su ejercicio diario de estos profesionales  es la de facilitar a los médicos, oficinas de farmacia y almacenes de distribución, los talonarios de vales de estupefacientes «al tratarse de medicamentos que están sometidos a una especial vigilancia y requieren de una documentación especial que nosotros proporcionamos», señaló Tomás Fernández, jefe de Servicio de Inspección Farmacéutica. El año pasado se facilitaron desde Sanidad 44 talonarios de estas recetas especiales que luego tienen que prescribir los médicos para determinados pacientes, como es el caso de la morfina, cifra que ha disminuido de forma considerable respecto a años pasados. 

Al igual que funciona la red de alerta en consumo, existe una red de alerta sanitaria que se ocupa de  los medicamentos y productos sanitarios. En concreto, en 2022 este servicio de la Delegación de Sanidad recibió 32 alertas farmacéuticas, que afectaron a 568 productos sanitarios, otras dos fueron por medicamentos ilegales o falsificados. «En caso de los medicamentos como llevan una trazabilidad sabemos exactamente a qué establecimientos en particular han llegado en caso de recibir una alerta», indicó la inspectora farmacéutica Elisa Hernández, que agregó que el aviso viene con instrucciones sobre si debe retirarse el medicamento o producto sanitario o se debe hacer una visita de inspección o hay que avisar al paciente que lo tiene prescrito, así como el listado de centros afectados. Igualmente, desde este departamento el pasado año se dio difusión a 46 notas informativas, así como otras 69 relativas a cosméticos y mascarillas. En 2021 recibió 28 alertas farmacéuticas, seis por medicamentos ilegales y 675 de productos sanitarios.

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