Empezar a sumar de tres en tres para no caer en un pozo del que es muy difícil salir. Es la mentalidad con la que los jugadores del Albacete deberían saltar el lunes en Valladolid, pues puede que en ese momento el Alba ocupe alguno de los puestos de quema y sólo la victoria les volvería a sacar a la zona de salvación.
Son seis jornadas seguidas sin conseguir un triunfo. Desde que se superó a Villarreal B a principios de diciembre, los blancos han empatado dos partidos y perdido cuatro. Pero la mala racha no viene solamente de esos encuentros, de los últimos 48 puntos en juego se han sumado solamente 12. 
Tras la jornada 25, el Albacete es décimo séptimo con 26 puntos, y lleva seis victorias, ocho empates y 11 derrotas. Es el segundo equipo más goleado con 38 dianas encajadas y ha logrado 29 goles a su favor.

Números de descensos

Las estadísticas muestran a un equipo que lo está pasando realmente mal y que por desgracia recuerda a las plantillas que perdieron la categoría en las temporadas 2015-16 y 2020-21. Empezando por la campaña 15-16, el Alba con Luis César Sampedro perdía en la jornada 25 (2-0) con la Llagostera y los blancos eran décimo novenos con 25 puntos. Con 36 goles en su contra, tenían un problema grande en defensa y a pesar de contar con una plantilla en la que destacaban futbolistas como:  Pulido, Paredes, Fede Vico, Edu Ramos, Jason o Portu, ese Alba descendió. Acabó el 21 en la tabla con 39 puntos y con César Ferrando en el banquillo, tras sustituir a Luis César Sampedro en la jornada 30.

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