Ucrania ha lanzado durante la pasada noche un ataque sobre la refinería de Novoshakhti, en la región de Rostov, una de las mayores de todo el país, que ya fue blanco del Ejército ucraniano junto a otras tres de las instalaciones petrolíferas hace ahora un mes, llegando incluso a detener sus operaciones.

Durante la noche de este viernes, cuatro drones del Ejército ucraniano han atacado esta refinería y uno de los cuales habría golpeado las instalaciones tras ser derriba por los sistemas de defensa aérea rusa, según han informado medios ajenos al Kremlin a través de Telegram.

En ese sentido, el gobernador de Rostov, Vasili Golubev, ha confirmado la presencia de cuatro vehículos aéreos sobre la región, si bien ha asegurado que han logrado ser neutralizados sin dejar víctimas ni daños importantes.

Este ataque se produce un día después de la ofensiva rusa contra infraestructuras energéticas en las provincias ucranianas de Járkov, Zaporiyia, Leópolis y Kiev.