La vida da muchas vueltas y si no, que le pregunten al candidato a la Alcaldía de Carcelén por el Partido Popular, Antonio Moreno. El pasado sábado, presentó su candidatura acompañado de los miembros de su lista en un acto al que asistieron 150 personas y destacados dirigentes de su formación política.

Como todos los candidatos, expuso su programa en el que se encuentran medidas como ampliar el servicio de ayuda a domicilio, poner en marcha un centro de día, abrir un local para los jóvenes, ampliar las plazas de guardería o explotar el gran potencial turístico del municipio.

Pero todo candidato tiene un pasado que siempre vuelve, más aún en la época de la redes sociales, y dentro del currículum del candidato del PP hay un detalle que muy pronto se volvió noticia nacional: que en su juventud se ganó la vida como actor de porno gay con el nombre de Héctor de Silva.

Moreno lo admite con toda la naturalidad del mundo: «Hace tiempo, me preparé las oposiciones para entrar en Geacam como bombero; mientras hacía las oposiciones tenía que ganarme la vida y eso fue lo que salió. Cuando las saqué, me incorporé a mi destino, a Carcelén, y eso fue todo».

Natural de Albacete, en Carcelén hizo su vida. Tiene una pequeña explotación ganadera y una amiga del alma, que es Paloma, la farmacéutica; se reencontró con unos parientes a los que había perdido la pista y tiene una pareja estable, que va y viene de Madrid. «Me he hecho un carcelenero más y todos en el pueblo conocen mi trayectoria, no tengo nada de lo que arrepentirme», afirma, «pero de lo que si me arrepentiría es de no devolverle al pueblo todo lo que ellos me han dado a mí, así que cuando desde el PP me propusieron presentarme, di el paso». Con una lista «transversal, en la que hay vecinos de todas las ideologías», Moreno quiere darle un impulso al pueblo con medidas como conseguir la Declaración de Interés Turístico Nacional para la tradicional Carrera de los Montones. Su principal preocupación es evitar que el cáncer de la despoblación se coma, poco a poco, al pueblo que le acogió «a causa de la falta de inversión en comunicaciones o en el desarrollo de la agricultura de regadío».