El entrenador del Albacete reconoció en la sala de prensa tras el partido de ida de la primera eliminatoria del playoff de ascenso a Primera, que acabó 1-3 a favor del Levante, que «evidentemente es una pequeña decepción» pero «quedan 90 minutos, por lo menos, e iremos al partido de vuelta a tratar de ser más eficaces y evitar que ellos lo sean».
Y es que el Levante no hizo mucho para llevarse tan preciado botín. «El rival ha tenido la suficiente eficacia en las dos áreas para, no siendo superior a nosotros, poder ganar y además por 1-3. Nos hemos metido dos goles en propia puerta. Es un resultado difícil para el partido de vuelta, pero no imposible», dijo Rubén Albés, para recordar que «si algo creo que era más difícil es que ahora mismo estuviéramos disputando los playoff, así que a deseo, esperanza y fútbol creo que no nos gana nadie».
El técnico gallego habló del primer gol, «un balón que no va a ningún sitio y le da en la rodilla a Álvaro y eso al final es incontrolable», para después tratar de mandar un mensaje positivo. «Creo que castigarnos por lo que ha pasado, con el desacierto o la falta de eficacia, o la mala fortuna, no tiene ningún sentido. Yo estoy de pie ya y así se lo he transmitido a los futbolistas. Creo que la afición está de pie y piensa que es posible, por lo tanto ya tenemos dos elementos tremendamente importantes para pensar que faltan 90 minutos por lo menos».
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