La Dirección General de Tráfico (DGT) publicó los datos de vehículos matriculados y dados de alta en 2022 en la ciudad de Albacete. Existen 126.725 automóviles en circulación, lo que supone una variación de décimas respecto al año anterior, un aumento considerable respecto a 2012, cuando en la capital estaban registrados 117.127 unidades, lo que supone un incremento del 8,1%.
Con estos datos oficiales, se puede concluir que la movilidad de los albacetenses se produce mayoritariamente con vehículos a motor, pero hay dos características del parque móvil de Albacete un tanto contradictorias. Por una parte, se produjo una importante bajada de matriculaciones en la provincia en los últimos años, lo que significa que la antigüedad de los vehículos dados de alta aumenta -el 30% de las unidades tiene más de 20 años y el porcentaje aumenta de forma preocupante en furgonetas y camiones-. Por otra, el segmento de los turismos híbridos y eléctricos gana terrenos al de los combustibles fósiles y en los cinco primeros meses de 2023 ya suponen el 51% de los automóviles que se matricularon en la provincia -en mayo hubo menos matriculaciones de este tipo, pero desde enero se registra una incremento del 37%-.
El sector automovilístico se encuentra en plena transición, debido a la irrupción de los coches híbridos y eléctricos. Sin embargo, teniendo en cuenta los datos oficiales, muchos albacetenses todavía apuestan por los vehículos tradicionales, entendiendo por estos últimos los que se mueven con combustibles fósiles. Esta circunstancia conlleva que la peligrosidad en las carreteras aumenta. La razón no es otra que la antigüedad media crece. Todavía los consumidores ven con cierto recelo la transición energética, en cuanto a movilidad de personas se refiere, aunque las empresas ya empiezan a apostar por las energías denominadas limpias y en las flotas de renting los coches híbridos y eléctricos son ya una amplia mayoría.
Habrá que observar de qué manera evoluciona el mercado auto-movilístico en los próximos meses para determinar cuantos años le quedan a los vehículos movidos por gasolina o diesel, porque en estos momentos las fluctuaciones mes a mes marca el devenir de los acontecimientos. De momento, la Unión Europea puso el límite para el año 2035, pero la tecnología avanza a marchas forzadas y en la práctica esa fecha puede adelantarse. Aunque existe el hándicap del precio de los vehículos híbridos y eléctricos, que con la inflación disparada, hará que muchas familias no puedan permitirse la compra de uno de estos turismos con tecnología nueva.