Rubén Albés compareció antes del último entrenamiento del equipo antes de viajar por la tarde hasta Villarreal para el partido que les medirá el sábado a las 14 horas al filial del submarino amarillo y manifestó que "se le ha dado mucho bombo al partido que hizo el equipo" frente el Eibar, "pero yo lo tomo con naturalidad y normalidad; jugamos un buen partido y le ganamos al líder, y ya está. Ahora toca otro partido en el que debemos mantener los mismos pilares, pero obviamente habrá matices porque el rival no es el mismo, quizás en la alineación y seguro que en el plan de partido".
Jugar en el Estadio de la Cerámina, "un escenario de Primera", significa que "de motivación vamos a full" y además se esperan unos 2.000 aficionados del Albacete en la grada. "Esos locos esperando al equipo, dándole energía, nos da un puno más, nos sentimos queridos y ojalá podamos devolverles todo ese cariño con otra alegría".
Cuestionado por la posibilidad incluso de poder pelear por el ascenso directo, vistos los resultados de las últimas jornadas y los puntos que se están dejando por el camino los cinco primeros, Rubén Albés fue claro. "Ni cierro ni abro puertas, pero solo pienso en el partido con el Villarreal B. Como equipo debemos ser estables en las emociones. Hace nada se decía que el Albacete ya había caído y vamos y le ganamos al líder. Nosotros tenemos que pelear por esa realidad que es jugar el playoff; parece lejísimos el ascenso directo y el playoff está difícil. Vamos a vivir el presente y disfrutarlo".
Sobre el filial amarillo dijo que "está haciendo una temporada magnífica siendo un filial y recién ascendido. Es un equipo complejo y difícil, que ha hecho buenos partidos y ha marcado muchos goles a balón parado". Y del horario, las 14 horas, fue claro. "Prefiero jugar a las 14 horas en la Liga de Fútbol Profesional que a las 18 horas en la Primera RFEF".
A nivel de equipo, Maikel Mesa seguirá de baja, mientras que en el caso de Álvaro Rodríguez y Julio Alonso. "Han entrado en alguna parte de los entrenamientos, hoy los probaremos y veremos si van convocados y tiene posibilidad de jugar".
Por último se le preguntó por el alto nivel de crispación que existen con el colectivo arbitral a todos los niveles y Rubén Albés volvió a ser trasparente en sus declaraciones. "El nivel de crispación es elevado, pero muchas veces el arbitraje resulta una excusa para clubes, entrenadores y jugadores. Se equivocan y a veces tienen varios errores para el mismo sitio y ya se empieza a hablar de persecución. Está claro que hay cosas que se pueden mejorar, como en el VAR, pero lo que hay que hacer es bajar los ánimos, estar traquilos y dejar trabajar al Comité Técnico de Árbitros".