Bruselas movilizará la reserva de crisis de la PAC

SPC
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Ante la presión del sector y de los gobiernos de España, Portugal, Francia e Italia, la Comisión se muestra dispuesta a utilizar los 250 millones de euros aún disponibles

Bruselas movilizará la reserva de crisis de la PAC - Foto: PABLO LORENTE Pablo Lorente

El sector agrícola, a pesar de las lluvias de estos días, sigue atenazado por la sequía. Numerosas producciones están directamente echadas a perder a estas alturas y otras muchas no van a poder recuperar gran cosa por mucha agua que caiga. La cosa se puso seria hace ya más de un mes y, desde entonces, ha habido muchas reuniones y algunos anuncios que aún no se han materializado en ayudas contantes y sonantes para unos agricultores y ganaderos que se encuentran en una situación crítica.

Ante esta situación, el ministro de Agricultura, Luis Planas, junto con sus homólogos portugués, francés e italiano, solicitaron el martes a la Comisión Europea (CE) una serie de medidas para paliar los efectos de la escasez de agua, entre las que destacaba la activación de la reserva de crisis de la Política Agraria Común (PAC). Una medida que la CE asumió de inmediato, ya que el mismo martes manifestó que se mostraba dispuesta a repartir los 250 millones de euros restantes de la reserva agrícola de crisis entre aquellos países de la Unión Europea más afectados por la sequía y las inundaciones «si las circunstancias lo justifican».

«Les aseguro que he escuchado alto y claro sus peticiones de apoyo», afirmó el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, durante su intervención ante los ministros de Agricultura de la UE en Bruselas. Tras su comparecencia, insistió en redes sociales en que «todavía hay 250 millones de euros disponibles en la reserva agrícola después de dos paquetes (uno de 56,3 millones y otro todavía no aprobado de 100 millones). Reiteré mi disponibilidad a desplegar estos fondos si las circunstancias lo justifican».

Consciente de la necesidad de invertir más en la creación de estrategias de gestión de riesgos y reforzar instrumentos para amortiguar el impacto del cambio climático, el comisario polaco recordó que la nueva PAC ofrece una «caja de herramientas» para reforzar la gestión de riesgos, por lo que confió en que esas posibilidades puedan «explotarse» a fin de dar soporte a aquellos agricultores más afectados por estas condiciones climáticas adversas. El comisario también señaló que ya ha encargado a los servicios de su cartera que evalúen las solicitudes presentadas por la delegación portuguesa (en nombre también de la española, la francesa y la italiana) para activar el apoyo que podría existir bajo la PAC con el objetivo de que todos los agricultores afectados puedan continuar con su actividad.

Por su lado, Luis Planas insistió en que se movilice «cuanto antes» la reserva de crisis, porque considera que es «justo» que los agricultores y ganaderos estén apoyados en esta situación causada por la crisis climática pero que tiene un «efecto directo» sobre los mercados agrarios. Además de la petición de activación de la reserva agrícola para los cuatro países, la solicitud, que ha contado con el respaldo del resto de estados, también incluía que se preste la «máxima atención» a medidas administrativas como las excepciones y flexibilidades -en particular en el contexto de la aplicación de la PAC- que puedan ser solicitadas por los distintos estados miembros afectados, incluidos los pagos directos, así como los programas operativos de las organizaciones de productores, el programa de apoyo al vino y el régimen de autorizaciones para plantaciones de viñedo.

El documento presentado por los cuatro países del sur de Europa señalaba que también es necesario aumentar el nivel de los porcentajes de los anticipos hasta al menos el 70% en el caso de los pagos directos, y hasta el 85% como mínimo para las ayudas concedidas en el marco del desarrollo rural; y que los anticipos de la solicitud única para 2023 puedan pagarse antes de que hayan finalizado los controles sobre el terreno.

Peticiones, todas ellas, que Wojciechowski ha asegurado haber escuchado «alto y claro», por lo que ha apelado a la tranquilidad de los países solicitantes para garantizar que la Comisión está «abierta» a considerar las posibilidades que hay sobre la mesa. El problema es que los agricultores tienen poco tiempo y mucha necesidad, por lo que la rapidez para poner en marcha los mecanismos necesarios será clave para el futuro de miles de explotaciones en los cuatro países.

Unión de Uniones.

Por su parte, Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos ha pedido celeridad en la puesta en marcha de las medidas que sirvan para paliar la sequía. La organización, que presentó ya hace un mes una batería de propuestas al subsecretario de Agricultura con medidas concretas para trasladar a Bruselas, ha lamentado la lentitud de la maquinaria europea en ponerse a trabajar para revertir la situación que no sólo atraviesa España, sino todo el sur de Europa.

Antes del anuncio de la CE, la organización ya solicitó activar las medidas excepcionales previstas en el artículo 221 del Reglamento (UE) 1308/2013 (OCM de los productos agrarios), así como el mecanismo de la Reserva para crisis en el sector agrario previsto en el artículo 226 del mismo Reglamento (UE) 1308/2013, con objeto de disponer de fondos para apoyar a las explotaciones agrarias afectadas por la sequía así como por el impacto de la guerra de Ucrania. Y recordó que este mecanismo está financiado mediante detracciones previas practicadas a los pagos directos de la Política Agraria Común recibidos por los agricultores y ganaderos, por lo que no debería ser difícil poder ponerlo en marcha.

En la misma línea, Unión de Uniones ha reclamado que se pueda modificar de urgencia del Reglamento (UE) 1305/2013 y Reglamento (UE) 2021/2115 de manera que se pueda habilitar, dentro de las intervenciones de desarrollo rural de las comunidades autónomas que así lo consideren por su situación de sequía, una ayuda extraordinaria dotada con los fondos de las intervenciones de Desarrollo Rural. «Soluciones hay y el sistema las contempla, sólo hace falta voluntad política e interés para ponerlas en marcha», han dicho desde Unión de Uniones. «Ha pasado más de un mes desde que saltaran todas las alarmas por la situación de sequía y se ha hablado mucho y actuado poco. No necesitamos un Ejecutivo que se preocupe, sino que se ocupe», han añadido.