El salón de actos de la Biblioteca Pública de Albacete acogerá mañana, a las 19 horas, dentro del ciclo Hablando en cine,  una nueva conferencia del divulgador y autor Alejandro Henares, que ha titulado esta charla Sólo para mis ojos, en la que analizará distintos aspectos sobre la sensación cinematográfica. 

¿Qué es Hablando en cine?

Esta serie de charlas, Hablando en cine, es el programa que a mí me gustaría tener en casa, en cualquier soporte, que yo hago para los demás. Se trata, a través de las conferencias, de transmitir la pasión cinéfila que tengo y todo lo que he aprendido, porque el cine, para mí, es la gran universidad del siglo XX.

¿Cuántas conferencias lleva de este ciclo?

Pues son muchas, porque comencé en 2015, que las inicié  con la pequeña pantalla, que es donde muchos hemos descubierto el cine. Por edad, no puedo decir que las grandes películas, Casablanca, Ben-Hur, Rebelde sin causa, las viese en una gran pantalla, porque las descubrí en la pequeña. Entonces, hago hincapié en el poder que tiene la imagen y claro, después me llevó a la gran pantalla.  

¿Todavía vigente?

Hoy hablaríamos de hibridación. El cine fue el arte por excelencia del siglo XX y hoy, más que de la televisión, es casi de museo, que es donde tiene que estar el cine. Junto con un Rembrandt, Goya o Cézanne, deberían estar John Ford, Griffith o Buñuel. Hoy  las reglas han cambiado y el cine es ya más un arte del siglo pasado, porque la televisión, por suerte o desgracia, es la que nos sirve de modelo para contemplar el cine.  

¿De qué hablará en Sólo para mis ojos?

En Sólo para mis ojos compartiré con el público lo que he podido aprender a través de la imagen, porque el hombre siempre ha vivido, especialmente desde el siglo XX, inmerso en una civilización de la imagen, una realidad cultural que no se puede disociar del paisaje urbano, pero también del doméstico. A diferencia de otros mamíferos, para los que el olfato o el oído ocupan un lugar más elevado, nosotros, los seres humanos, somos primordialmente animales visuales.  

¿Se pueden aprender muchas cosas?

Claro, porque hablar de cine es hablar de literatura, escultura, arquitectura, hasta de música. Somos imágenes y la mayoría de lo que aprendemos es a través de la imagen. El 85, 90  por ciento de la información que recibimos, es a través del sentido de la vista. Son ventanas en nuestro corazón y recuerdo y yo he aprendido casi todo. Creo que el cine nos hace ser mejores personas.  

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