La Unión de Pequeños Agricultores reunió ayer en el Casino Primitivo de Albacete a delegados, técnicos, gestores y productores para debatir nada menos que los 'Retos de la Incorporación de los Jóvenes a la Agricultura y la Ganadería'.

Y el reto, en Albacete sin ir más lejos, es de órdago. Según el INE, el 45% de los titulares de explotaciones agrarias de la provincia (9.265 personas) ya tiene más de 65 años. Por contra, los que tienen 34 o menos son un exiguo 0,04% (778).

Por esta causa, no es de extrañar que ayer se diese un auténtico 'desembarco' de altos cargos para dar cuenta de lo que se hace para evitar que el campo se quede sin jóvenes, como Fernando Miranda, secretario general del Ministerio.

«En los próximos 10 años, dos tercios de los agricultores españoles entrarán en la edad de jubilación»,  reconoció, «por lo que garantizar el relevo generacional es uno de los ejes básicos de la política agraria de nuestro país».

Por esta causa, y en el marco de la reciente reforma de la PAC, se aumentó en un 50%, hasta los 220 millones de euros, el presupuesto anual para favorecer la incorporación de jóvenes a una actividad que es cada vez «más exigente».

Con estos fondos, se financian programas como el que se presentó ayer como parte de la jornada, denominado Cultiva y que lleva a jóvenes aspirantes a agricultor a visitar explotaciones de toda España, cuyos titulares hacen a la vez de anfitriones y tutores.

En dicho programa, también interviene la Junta, cuyo titular de Agricultura, Julián Martínez,  recordaba que el Gobierno regional «ha puesto 265 millones en los útlimos ocho años para conseguir que 4.000 jóvenes se incorporen a la actividad agraria en la región».

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