Una oración y una flor para la Virgen

Antonio Díaz
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La Catedral acogió uno de las ceremonias más singulares en honor a la Patrona, con los niños como protagonistas de la ofrenda, en un acto conducido por Antonio Abellán Navarro

Una oración y una flor para la Virgen - Foto: Rubén Serrallé

La Catedral de Albacete acogió el tradicional acto de homenaje de los de los niños a la Virgen de Los Llanos, con dirección de Antonio Abellán Navarro, que se encargo de que todos los niños, muchos de ellos acompañados por sus padres, entendieran el significado del acto.

Tras la apertura con música, indicó Antonio Abellán que «hemos venido a saludar a la Virgen María y ofrecerle, cada uno de nosotros una flor, una oración y nuestro cariño, pero en la iglesia vive Jesús, que está en el sagrario, que es el sitio más importante, porque está él y lo vamos a saludar también con una oración», dijo en un sencillo mensaje que llegó a los niños. 

Recordó Antonio Abellán una tradición muy arraigada entre los cristianos, «que consiste en ir a una casa de la Virgen a visitarla y esa costumbre se llama romería, así que aquí hemos venido a hacerle una visita, cantarle y entregarle una flor, así que esto es una romería».

Fue dando paso a los distintos grupos, de colegios y parroquias,  que ofrecieron sus canciones y sus oraciones a la Virgen, para después hacer una ofrenda floral, como es tradicional en la jornada».

Ofrenda infantil.

Por su parte, el presidente de la Real Asociación de la Virgen de Los Llanos, Antonio Fernández-Pacheco, recordó que «esta ofrenda infantil es importante porque fomenta la devoción en los más pequeños y también es un anticipo de la procesión del sábado, en la que ya estarán presentes todos los colectivos, que acompañarán a la Patrona por las calles del centro de la ciudad y esperamos contar, seguro, con miles de albaceteños acompañándola».

Valoró la ofrenda infantil, «que viene realizándose desde que tengo recuerdo y al menos, desde 2016, ha estado a cargo de don Antonio Abellán, que explica muy bien el significado del acto a los niños y las niñas. Es un momento muy bonito, emotivo y concurrido que, al final llega al corazón de todos».