«Creo que el Gobierno de García-Page lo está haciendo bastante bien y a las pruebas me remito porque esta es su tercera legislatura». Con estas palabras cerró el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, el debate de la moción presentada por Vox relativa a la incorporación de jóvenes en el sector agrario de Castilla-La Mancha.

Un debate en el que Vox y el Partido Popular pidieron aumentar las cantidades que reciben los jóvenes que optan por trabajar en el medio rural.

El portavoz del Grupo Parlamentario Vox, David Moreno, aseguró que al Gobierno de Castilla-La Mancha «no le interesa que los jóvenes accedan a la totalidad de las ayudas. De ser así los requisitos serían más fáciles», dijo.

De su lado, la parlamentaria del PP Lola Merino consideró que hay dos formas de hacer política agraria, que quedan reflejadas en las dos últimas PAC, la negociada por su partido para los años 2014-2020; y la firmada bajo un gobierno socialista y que hace referencia al periodo 2023-2027.

Dicho esto,Merino calificó al presidente regional de «rácano, rosoño y desastroso» a la hora de gestionar las ayudas europeas para la incorporación de jóvenes.

El consejero del ramo fue el último en intervenir. Insistió en que Vox desconoce en qué consisten las convocatorias, mientras que al PP le recriminó «tener el cuajo» de defender la negociación de la PAC que hizo su partido y que supuso perder «miles de millones de euros», al tiempo que se comprometió a consensuar «al máximo posible» con el sector todas las líneas de ayudas que se pongan a su disposición.